El Levante encuentra su pegada

VALÈNCIA. El Levante tiene pegada. Al menos, la encontró en La Cerámica, por más que la filosofía del rival permitiese sacar a relucir algunos puntos fuertes que parecían olvidados en la ofensiva. Y es que el cuadro del sancionado Felipe Miñambres triunfó a los golpes. Ganó porque fue mejor que el Villarreal en las áreas, tanto en ataque como en defensa. Porque el filial del Submarino también llenó su saco de ocasiones y acabó coleccionando errores. Tanto que, durante gran parte del primer tiempo, dominó e incluso mereció empatar el tempranero tanto de Álex Muñoz. 

El lateral alicantino volvió a ser uno de los mejores y Brugui se alza como uno de los jugadores del 2024 granota. Su sexto tanto liguero alivió al equipo en momentos complicados antes del descanso y, por fin, el Levante topó con un final feliz... y tranquilo. Pocas veces ha logrado el cuadro de Orriols esa combinación. Probablemente desde la última victoria fuera de casa esta temporada, hace la friolera de casi siete meses. Estas son las notas de Plaza Deportiva tras el Villarreal B - Levante:

Andrés Fernández (6): Seguro. El murciano se mantuvo a raya. A su nivel. Salvó el empate del Villarreal cuando el Levante todavía vencía por la mínima. Tuvo trabajo. Mucho. Porque los amarillos dominaron durante gran parte del primer acto... y probaron mucho la portería de Andrés.

Andrés García (7): Puñal. Esta vez sí, el cuchillo que es Andrés en el lado diestro tuvo dientes de sierra. Cortó. Hizo herida. De sus piernas nace el tercer tanto granota y de su ímpetu, varias acciones de peligro por derecha. Su dominio de las dos piernas aporta en el carril profundo.

Dela (6): Bien. Otro partido serio y de liderazgo del zaguero de El Escorial. Manda y lidera la defensa granota, aunque inició algo descolgado y sin entenderse con Cabello. Engrasó rápido esa dupla en un partido de cierto sufrimiento atrás a pesar de la victoria contundente.

Cabello (7): Con los cinco sentidos. El canario fue una de las sorpresas del once y volvió a estar serio. No defraudó, como tampoco lo hizo en Santander. Seguro, sobrio, tranquilo y sin complicarse.

Álex Muñoz (8): Esencial. Segundo gol de la temporada y de nuevo importante. El alicantino cazó el rechace de la falta de Pablo adelantándose a un estático Pablo Íñiguez. No solo por el tanto, sino por otro partido de absoluto liderazgo y sobriedad en el carril zurdo, el '3' fue otra vez uno de los futbolistas del partido. Se retiró con problemas físicos, aunque todo apunta a que, con 0-3 en el marcador, Miñambres quiso curarse en salud.

Oriol Rey (7): Buen regreso. Titular cinco jornadas después. No saltaba de inicio desde la cita de la remontada contra el Elche en Orriols y llevaba cuatro choques consecutivos vistos completos desde el banco. Y con esas, fue la otra gran sorpresa de la alineación inicial. Empezó bien, con poso en la medular e incrustándose entre centrales para sacar la pelota jugada. Como si esa salida repentina de los onces no hubiese mermado su confianza. Un mal control que a punto estuvo de costar el empate del Villarreal pareció, entonces sí, encender su alarma. Desde ese momento, más comedido, pero recuperó el resuello. En definitiva, un regreso potente del centrocampista.

Pablo Martínez (5): Aislado. No estuvo bien. El capitán estuvo demasiado solo en la medular, con Oriol preocupado de Ontiveros y Novoa en sus caídas por dentro, y demasiado retrasado. Esto provocó que Pablo se perdiese en un círculo central que se le hizo inmenso, con pocos apoyos. Sorprendió, en cualquier caso, que fuese el primer sustituido al descanso.

Lozano (7): Este es Lozano que quiere el Levante. Le costó por fuera, pero por dentro fue el Lozano diferencial que necesita este equipo. Volvió a brillar su conexión con Brugui, demostrado quedó en una conducción y asistencia mágica. Más allá de esa acción, esta vez el valenciano se encontró y se gustó. Tiene que mantener este nivel. Se retiró con molestias, cojeando.

Carlos Álvarez (7): Destellos de magia. Fue un caso parecido al de Lozano, en el costado contrario. Excesivamente taponado pegado a la línea de cal, pero aportó cuando le dejaron un metro. La lástima, que fue demasiado intermitente. Aún así, una de las figuras destacadas del encuentro en la ofensiva granota... y en la defensiva. Porque desbloqueó una nueva skill: la del recuperador. Hasta cinco de mucho mérito, según las estadísticas de La Liga.

Brugui (7,5): El jugador del año. El de Bàscara es el futbolista del 2024 granota. Su resurrección tras la oscuridad a la que le había sometido Calleja es digna de estudio. Acumulaba tres jornadas sin marcar y anotó el cuarto tanto desde que Miñambres cogió el timón -el sexto de su temporada-.

Dani Gómez (7): Renaciendo. Empezó fallando un mano a mano marca de la casa, pero jugó cómodo. Anotó su sexto gol de la temporada en un complicadísimo remate. Le ganó la batalla a Pablo Íñiguez y, por fin, rompió su sequía. Muy vivo.

Kocho (6): Bien. Fue el primer cambio, entró al descanso por Pablo Martínez y engrasó una pareja con Oriol Rey en la medular que se mantuvo en paralelo el resto del encuentro. Atrás quedó el escalón en que Oriol y Pablo habían tenido problemas antes del intermedio. Kocho, agresivo e intenso.

Iván Romero (5): Ímpetu. Entró y se incrustó de nuevo en banda izquierda, donde no parece encontrarse. Lo que no se negocia en el manchego es la energía.

Valle (-)

Bouldini (-)

Postigo (-)