Titulares sin presión

VALENCIA. Visto el rendimiento mediocre del equipo titular, los tres entrenadores que han dirigido al Valencia esta temporada seguro que un día pensaron en cambiar por completo el once con el que estaban jugando. Alves pasó un periodo en el que todo lo que le chutaban acababa en gol. Cancelo ha tenido lagunas continuas en defensa. Garay está dando un rendimiento muy por debajo del nivel que se espera. Ha habido partidos en los que Parejo ha estado desparecido en combate. Los bandas han dado muy poca profundidad al equipo y en definitiva, los teóricos titulares no han estado a la altura.

Lo mismo que ve un aficionado, por supuesto que también lo ve un entrenador. Sin embargo, un gran problema que han tenido los técnicos del Valencia y sigue teniendo Voro, es que la segunda línea de combate no está ofreciendo nada. Por ello los entrenadores no realizan los tres cambios durante los partidos. Entienden, por lo tanto, que en el banquillo no hay nada que pueda hacer que el equipo mejore.

Jaume tuvo una oportunidad de oro para quitarle el puesto a Alves en Copa frente al Celta, pero encajó 3 goles en 20 minutos. A pesar del rendimiento irregular de los centrales titulares, Abdennour nunca se ha postulado como solución; prácticamente en todas sus apariciones ha generado dudas y despistes.

En la medular, Mario Suárez no ha ofrecido equilibrio. De hecho, ha tenido partidos verdaderamente horribles, impropios de un internacional con España. Medrán ha desparecido por completo desde el choque frente al Eibar, donde se le vio totalmente descolocado. 

En cuanto al ataque, Voro también ha apostado por Cancelo en banda, pero no ha acabado de generar peligro. Sustituir a Nani hoy es una quimera. En ese flanco, el teórico sustituto debería ser Bakkali, puesto que también es un extremo diestro que juega por la izquierda. Sin embargo, no ha sido titular ni para Voro ni tampoco para Nuno, Neville, Ayestarán y Prandelli. Lo suyo es un auténtico misterio. Obviamente, Munir y Mina tampoco son jugadores de banda. En esa demarcación sufren mucho desgaste y pierden frescura de cara a puerta. Por último, en la posición de delantero, ninguno tiene unas cifras destacables.

Todo esto hace que haya una falta de competitividad enorme en el equipo. No importa qué rendimiento ofrezcan los teóricos titulares, no sienten ningún tipo de presión ni temor por perder el puesto. El único que ha pasado a tener un protagonismo mayor ha sido Soler. Seguro que en la cantera hay alguna solución más.