Piccini: “Mi éxito lo he construido a base de esfuerzo y trabajo"

VALÈNCIA. Es un proceso largo de recuperación, tras sufrir una fractura en la rótula necesita entre seis y siete meses para volver a jugar, no es fácil acudir a diario a la Ciutat Esportiva de Paterna y ver cómo tus compañeros salen a entrenar, ver al equipo competir y ganar partidos, pero como reconoce Cristiano Piccini en exclusiva a VCF MEDIA: “Ahora necesito tiempo y trabajo. Un día volveremos a estar aquí hablando y estaré jugando”.

Poco a poco va cubriendo etapas y recuperando su sonrisa contagiosa, la que ni en los peores momentos perdió delante de su hija: “es el amor más grande que una persona puede tener, ser padre”. Día a día, a base de dobles sesiones de trabajo de fisioterapia, dedicando horas haciendo ejercicios con el readaptador, trabajo en la piscina… Sin descanso. Uno de los secretos del éxito en la carrera profesional de Piccini ha sido el “esfuerzo”, el que ahora también dedica para recuperarse de una lesión de gravedad.

“Desde pequeño tenía más cualidades que muchos, pero también había chicos mejores que yo que se han quedado a mitad del camino, creo que por no esforzarse o no tener la mentalidad correcta. Has de tener calidad física, técnica y humana, pero el éxito mío lo he construido a base de esfuerzo y trabajo”, reconoce el italiano, que en este periodo de recuperación “he conocido más el corazón de muchas personas que lo que ves en el día a día, que al final es tu profesión”.

¿Cómo se encuentra?

Estoy bien, visto el tiempo que ha pasado desde la operación creo que estoy muy bien, es mi sensación y las de los fisioterapeutas, los médicos y los readaptadores, así que contento con el trabajo que estamos haciendo todos.

¿Qué le pareció el detalle de sus compañeros saliendo al césped con una camiseta dándole ánimos?

La verdad es que somos un grupo espectacular, un grupo unido, nos queremos todos, no hay mal rollo con nadie. Somos una familia de verdad y todos han estado espectacular conmigo, desde los compañeros, al cuerpo médico, al cuerpo técnico.

Fueron momentos en los que a todos nos vino a la mente su gol a la SD Huesca, un tanto que valió tres puntos importantísimos y significó mucho.

El gol ante la SD Huesca fue muy importante para el equipo, porque nos permitió ganar en una época en la que no nos salían los resultados antes de irnos de vacaciones por Navidad. La celebración fue de rabia por todo lo que estaba pasando en el campo, mi situación personal, pero a la vez perfecta por la situación que se vivía. Y luego se reflejó con el paso de los meses esa foto de celebración con un equipo unido y que al final consiguió lograr lo del año pasado: entrar en Champions y ganar un título. El equipo se ve en esa foto. Me pasé todo el día viendo el gol.

Ese día enloqueció Mestalla, ¿qué significa para ustedes?

Estás en un estadio donde te ayudan a sacar lo mejor de ti y lo sacas. Mestalla es top por eso, cuando están ahí te animan y te ayudan, es muy difícil de que nos ganen en nuestra casa.

¿Con ganas de volver?

Claro que tengo ganas, faltaría más. Trabajo todos los días para volver a jugar y volver a sentirme jugador.

Quien le conoce bien ve en Piccini a una persona muy familiar y como él reconoce, “desde que conocí a mi mujer me cambió la vida y desde que nació nuestra hija también en positivo. Soy más equilibrado como persona, lo importante es que ella esté bien, estoy feliz si mi hija y mi mujer están bien. Son lo más importante de mi vida, luego está mi familia y mis padres”.

Curiosamente, como desvela a VCF MEDIA, “si no me hubiera lesionado el ligamento cruzado no habría conocido a mi mujer. De esa lesión aprendí a ser más profesional y hay que ver lo positivo, en aquella ocasión conocí a la mujer de mi vida. Algo bueno pasará también en esta lesión”.

Han sido muchísimos los futbolistas que le han dedicado palabras de ánimo desde que se lesionó, “amigos que han quedado para siempre”. En este vídeo a Piccini le arrancaron una sonrisa mensajes de compañeros como Antonio Adán (Atlético), Rubén Pardo (Real Sociedad), Álvaro Cejudo (Racing), Stefan Ristovski y Bruno Fernandes (Sporting Clube Portugal) o el de Salvatore Sirigu (Torino FC). Y tampoco quisieron faltar los mensajes cariñosos de su representante, Darío Ristori, o su padre Carlo.