ALICANTE. Teniendo en cuenta los tiempos convulsos que vivimos a todos los niveles, siempre reconforta ver a aficionados de distintos equipos de fútbol compartir terraza y grada sin el menor problema. Lo anterior sucedió este domingo en el centro de Elda (en su Plaza Mayor) primero y en el estadio Nuevo Pepico Amat después, con motivo del derbi que enfrentó al Eldense y el Elche, los dos representantes de la provincia de Alicante en el fútbol profesional.

Es verdad que ayudó mucho el hecho de que hiciera un porrón de años que no se veían las caras en partido oficial (hasta hace dos tardes les separaban la friolera de cinco categorías), que algunos sean incluso aficionados de los dos equipos y que los núcleos duros de ambas masas sociales (como ocurre también con la del Valencia) compartan afición rival: la del Hércules. Hacia los aficionados del equipo blanquiazul, que hoy compite dos escalones por debajo, pero que en más de una ocasión ha estado por encima (incluso de ambos), se dirigieron precisamente algunos de los cánticos (sin ir acompañados de insultos, desde luego dentro del estadio) que entonaron unánimemente no pocos azulgranas y todos los franjiverdes en los prolegómenos del duelo de este domingo y en algún momento del mismo.