VALÈNCIA. La contratación del central suizo Eray Comert, procedente del Basilea, es el último refuerzo del Valencia en una demarcación en la que se han contratado hasta quince jugadores en la última década.

La lesión del hispano-brasileño Gabriel Paulista y los problemas físicos que arrastra Omar Alderete han llevado al club a reforzar dicha posición que también suele ocupar Diakabhy o incluso el canterano Cristian Mosquera.

La pasada campaña, otro central también aterrizó en Valencia en el mercado de invierno, como fue el portugués Francisco Ferro que pasó inadvertido ya que disputó tan solo 3 encuentros de Liga.

En el curso 2019-2020 la novedad fue el retorno del francés Eliaquim Mangala al club de Mestalla, donde ya había estado cedido por el Manchester City en la temporada 2016-2017.

Mangala coincidió con centrales como el argentino Ezequiel Garay, el brasileño Gabriel Paulista y el también francés Mouctar Diakabhy.

Precisamente fue el galo Diakabhy quien se incorporó en la temporada 2018-2019 procedente del Olympique de Lyon, y más tarde, en el mercado invernal, lo hizo el argentino Roncaglia en calidad de cedido.

Una temporada antes el Valencia había fichado a los defensas Jeison Murillo y Gabriel Paulista, procedentes del Inter de Milán y el Arsenal, respectivamente. El primero fue cedido al Barcelona y traspasado a la Sampdoria mientras que el segundo es el más veterano de los que permanecen en nómina.

Ezequiel Garay llegó en la 2016-2017, procedente del Zenit de San Petersburgo, junto con Mangala que vino cedido.

Pero además de las adquisiciones de Mangala y Garay, el conjunto valenciano había fichado en ese tiempo a Rubén Vezo, Philippe Senderos y Nicolás Otamendi, en el curso 2013-2014, y en la campaña 2014-2015 contrató al alemán Shkodran Mustafi.

Asimismo, en la temporada 2015-2016 las adquisiciones fueron el tunecino Aymen Abdennour y el brasileño Aderlan Santos que fueron traspasados por su irregular rendimiento.