VALÈNCIA. La mejora de contrato de Dani Cárdenas está en stand by... pero sobre la mesa. Al de Terrassa le resta un año de contrato y tiene firmados otros dos opcionales que ha de activar el Levante. El club, tras el buen año del joven meta -que incluso ha terminado la temporada siendo titular en cinco de los últimos siete partidos-, quiere que Cárdenas siga creciendo en el Ciutat de València, donde incluso puede que sea primera espada la temporada que viene. Eso sí, para ello hay una mejora que examinar en la vinculación del portero con la entidad granota. Y él entiende que así ha de ser y que se tiene que negociar.

La ampliación inulateral de dos cursos por parte del club no lleva consigo esa mejora salarial. Es un contrato firmado desde marzo de 2020 y cuyas cantidades están marcadas, pero se pueden renegociar. Y esa es el deseo del futbolista, que entiende que su año así lo merece. Es, por el momento, el jugador peor pagado de la plantilla y con solo una temporada en la élite tampoco busca ni un cambio sustancial ni tampoco un mero reconocimiento, sino una mejora propiamente dicha que se ha ganado.