VALÈNCIA. El deporte valenciano está de luto. Condolencias y muestras de apoyo a todos los afectados por las consecuencias derivadas de la catástrofe originada por la Dana en toda la provincia de València. Los diferentes clubes y entidades deportivas de la Comunitat Valenciana se sumaron al luto en sus respectivos canales. 

En ese sentido, Valencia, Levante, Elche, Hércules y Valencia Basket solicitaron el aplazamiento de sus compromisos ante las gravísimos efectos que han azotado al territorio valenciano, con más de medio centenar de víctimas. Tampoco se jugará hoy el partido copero del Manises en Getafe después de que ambas entidades solicitasen el aplazamiento en solidaridad con el pueblo valenciano y la RFEF lo admitiera a primera hora de la tarde.

En clave valencianista, el partido del próximo sábado contra el Real Madrid está en el aire. El club blanco se ha puesto a total disposición del Valencia, que está valorando un aplazamiento conforme se decrete el estado de luto oficial en toda la provincia cuando concluya la tragedia. Cabe recordar que hace poco más de ocho meses, el Valencia ya aplazó un encuentro liguero contra el Granada por este motivo cuando ocurrió otra tragedia con el incendio del edificio de Campanar.  

Además, el Valencia  ha unido fuerzas con el Banco de Alimentos de Valencia para convertir el Camp de Mestalla en punto de depósito de alimentos y enseres de primera necesidad.

El Levante, pendiente del encuentro del lunes en el Ciutat

Mientras tanto, el Levante queda todavía a la espera respecto a la celebración del encuentro que, en el caso granota, se habría de jugar en el Ciutat de València en lunes próximo, a las 20:30h. La distancia respecto a la tragedia es de una semana, pero ante el posible aplazamiento del encuentro del vecino en Mestalla, en el club de Orriols todavía desconocen posibles traslados de horarios en este sentido. 

El Levante fue uno de los primeros clubes afectados el trastoque de horarios y partidos debido al temporal. La expedición acudió al Ciutat para, desde el estadio, salir en autobús rumbo al aeropuerto de Manises entorno a las 21h. El vuelo rumbo a Santiago de Compostela estaba fijado para las 22:35h, pero el aeropuerto estaba impracticable. El club envió a sus futbolistas a casa a expensas de conocer cuál sería la situación al día siguiente.

En un principio, la intención era viajar el mismo miércoles por la mañana, sorteando la concentración en Vigo prevista para esa misma noche. Sin embargo, de madrugada el Levante supo que ni siquiera en la mañana de partido podría fletar un vuelo rumbo a Galicia. El club solicitó el aplazamiento con el beneplácito del Pontevedra, rival en primera ronda de Copa, y el miércoles se confirmó el aplazamiento definitivo al jueves de la próxima semana.