VALENCIA. El Elche CF ha completado el primer tercio de la competición en la Liga 1/2/3 instalado en la zona media alta de la tabla clasificatoria pero sin encontrar todavía un equilibrio en su juego que le permita consolidarse entre los aspirantes al ascenso.

El equipo ilicitano cierra la décimo cuarta jornada del campeonato en la novena posición con 19 puntos, a dos de los puestos de ascenso directo, a uno de la zona de promoción y a cuatro del descenso.

El conjunto que entrena Alberto Toril, que debutaba en el banquillo ilicitano, arrancó la temporada sin fijarse una meta a largo plazo, aunque tanto el club como la afición confiaban en que el equipo pudiera estar en la pelea por los puestos de promoción.

La propuesta futbolística de Toril, fundamentaba en la posesión, el toque y el juego de ataque, agrada a la afición, aunque el equipo no ha terminado de tener un comportamiento regular, alternando buenas actuaciones con otras más decepcionantes.

Prueba de ello es que el Elche ha sido capaz de reaccionar a un 0-3 en casa ante el Lugo con otro 0-3 a su favor en Huesca, de ganar 1-3 en Zaragoza o de empatar 4-4 contra el Nàstic en un partido que llegó a dominar durante el segundo tiempo por 3-1.

En el aspecto positivo destaca la faceta goleadora, en la que el Elche ha sabido sobreponerse a la marcha de Sergio León, máximo goleador de la categoría de la pasada temporada y traspasado al Osasuna, con una vocación ofensiva colectiva, ya que los goles están mucho más repartidos.

Además, el equipo ilicitano es el segundo máximo anotador de la competición y cuenta con jugadores que están rindiendo a un excelente nivel, como Juan Francisco Martínez 'Nino', Pablo Hervías o Javier Matilla, a los que se ha sumado recientemente Álex Fernández.

Y eso a pesar de que dos de los principales referentes ofensivos, como Guillermo Fernández o Eldin Hadzic aún no han podido aportar lo que se esperaba de ellos por falta de acierto y lesiones, respectivamente.

Por el contrario, el punto débil del equipo está en su sistema defensivo, que le ha llevado a ser el equipo más goleado de la categoría y el conjunto ilicitano de las últimas diez temporadas en Segunda que más tantos ha recibido.

El entrenador y los jugadores achacan la fragilidad defensiva a varios motivos, pero principalmente a errores puntuales en la salida del balón que penalizan al equipo, y a una especie de peaje que debe pagar el Elche por su forma ofensiva de jugar.

De hecho, el equipo ilicitano solo ha logrado dejar dos ocasiones su portería a cero en toda la temporada, la última la pasada jornada ante el Real Valladolid (2-0) en un partido en el que el Elche, por fin, pareció encontrar ese equilibrio tan reclamado entre el juego defensivo y el ofensivo.

"No especulamos nunca con el empate, prefiero ganar y mirar siempre a la portería contraria aunque nos cuente goles", señala Toril, quien está convencido de que cuando el Elche logre pulir pequeños errores estará en condiciones de pelear en la zona alta de la tabla.