VALÈNCIA. El Valencia Basket, tras perder este lunes el primer encuentro de su eliminatoria de cuartos de final ante el Barça por 84-74, está obligado a ganar los dos siguientes partidos de serie para pasar de ronda, algo que hasta ahora sólo ha logrado una vez de las diez en las que empezó con derrota un cruce al mejor de tres.

Esa eliminatoria fue la de cuartos de final de la campaña 2018-19 que le midió al Unicaja que se impuso en la Fonteta en el primer encuentro de la serie. En aquella ocasión, el equipo que dirigía Jaume Ponsarnau fue capaz de imponerse en Málaga en el segundo encuentro, de recuperar el ‘factor pista’ y de pasar a semis con un triunfo ante su público en el tercer partido de la serie.

La historia del Valencia en la lucha por el título de la ACB arrancó a principios de los noventa con tres eliminatorias de octavos de final al mejor de tres que empezó con derrota y en las que acabó eliminado. Lo mismo pasó a partir de la campaña 2007-08 cuando el formato se adoptó para los cuartos de final, aunque en ese caso fueron cuatro los cruces que arrancó con derrota.

Después llegó esa recordada eliminatoria ante el Unicaja. Desde entonces ha jugado otras tres eliminatorias al mejor de tres partidos, de las que ha arrancado con derrota dos, contra el Madrid en las semifinales de la campaña 2020-21 y ante el Baskonia en los cuartos de la pasada, y en ambos casos acabó eliminados.

El Valencia recibirá este viernes al Barça en la Fonteta obligado a vencer para seguir vivo y en caso de hacerlo la eliminatoria se decidirá de nuevo en el Palau Blaugrana el lunes.

Si se amplía la muestra para incluir también los cruces al mejor de cinco partidos que arrancaron con derrota, el porcentaje de éxito sigue siendo del 10% porque en total son veintidós cruces disputados de los que superó dos, el ya reseñado ante el Unicaja y la final de la Liga de 2017 ante el Real Madrid, en la que perdió el primer choque por 87-81 pero que finalmente supuso su primer y hasta ahora único campeonato.