VALÈNCIA. El Valencia Basket buscará este viernes en la segunda jornada de la fase regular de la Euroliga su primer triunfo en la competición en la cancha de un Olympiacos sacudido por la reciente marcha de su técnico David Blatt y sin un sustituto oficial aún en su banquillo.

El equipo valenciano cayó con claridad en su debut en el torneo, en el que logró competir con el CSKA de Moscú en la primera parte pero en la segunda se vino abajo y no plantó cara al conjunto ruso, que le acabó arrollando.

Tras ese choque, el conjunto de Jaume Ponsarnau logró una cómoda victoria también en la Fonteta ante el Coosur Real Betis, en un encuentro en el que su buen arranque de primer y tercer cuarto le permitió dominar el guión sin grandes complicaciones. 

Enfrente también tendrá a un rival que cayó con estrépito en la primera jornada, en su caso por un inesperado 82-63 en la pista del Asvel Villeurbanne.

La abultada derrota dio pie a la marcha de Blatt y al nombramiento de su hasta ahora ayudante Kestutis Kemzura como entrenador interino para las próximas semanas. 

El Olympiacos arrastra problemas económicos desde hace meses y juega en la segunda división helena por desavenencias con la organización de la primera, lo que le permite centrarse casi en exclusiva en la Euroliga.

Mantiene a sus tres jugadores griegos de referencia, Vassilis Spanoulis, Georgios Printezis y Kostas Papanikolau, y ha incorporado a jugadores de primer nivel como Brandon Paul, Mindaugas Kuzminskas o Augustine Rubit.

Para este encuentro, Jaume Ponsarnau tendrá la baja de Louis Labeyrie por problemas musculares y deberá hacer un descarte técnico entre los trece jugadores ‘sanos’ que se desplazarán. 

El Valencia afronta esta Euroliga con el objetivo de acabar la fase regular entre los ocho primeros y por delante del Alba Berlín, pues sólo así podrá repetir en la máxima competición europea la próxima campaña.