VALENCIA. El Valencia CF se hunde. El equipo entrenado por Gary Neville no da la más mínima sensación de poder amortiguar su caída libre en Liga que le ha llevado a estar a cuatro puntos de la zona de descenso tras 23 jornadas. El equipo con la llegada del británico al banquillo, no ha dejado entrever ni un solo atisbo de mejoría salvo el espejismo cosechado en la Copa del Rey ante rivales más débiles como Barakaldo, Granada y UD Las Palmas. De hecho, se encuentra en una situación deportiva peor incluso que cuando decidió tomar las riendas del primer equipo valencianista.

Este equipo al que ya no le quedan argumentos desde hace semanas para justificar la lamentable racha de doce partidos consecutivos sin ganar, carece de ideas, personalidad y hasta de fortuna en algunas ocasiones.

Neville que ayer quitaba hierro a la delicada situación que atraviesa el equipo en la rueda de prensa posterior a la derrota en el Benito Villamarín, no ha aportado nada al juego del Valencia CF. No se aprecian movimientos mecánicos en la salida de balón, así como combinaciones que permitan al equipo ni siquiera tener posesiones largas en busca de coger oxígeno y acercarse el gol. 

El Valencia CF que está pidiendo a gritos un cambio cada encuentro en el que sale escaldado por cualquier rival que se le presenta, no ofrece síntomas de poder recuperarse y esa sensación es la que hace saltar todas las alarmas dentro del valencianismo. 

El conjunto valencianista saltó al campo de una forma muy similar a su rival, atenazado, nervioso y más pendientes de estar bien colocado que de intentar llevarse los tres puntos. Por ello, apenas se generaron ocasiones durante los primeros 45 minutos.

Sin embargo, el Real Betis encontró esa salida de emergencia para desatarse en ese enésimo error defensivo del Valencia CF que ha condenado al equipo blanquinegro en los últimos tres meses en la competición liguera. Abdennour con una pasividad pasmosa, dejó correr un disparo defectuoso de Van Wolfswinkel para que Rubén Castro, lo rematara a placer al fondo de las mallas.

El Valencia CF con escasas ideas, intentó intimidar al Betis y lo consiguió en la siguiente jugada con una buena internada de Cheryshev que sirvió el balón en bandeja para que Negredo marcase pero su remate lo sacó en la línea de gol un defensa del Betis. El '7' que sigue sin encontrar su mejor versión y de hecho está muy lejos de conseguirla a corto plazo, volvió a desaprovechar una clara oportunidad para meter al Valencia CF en el partido.

Posteriormente, al margen de una ocasión de Rodrigo que resolvió bien Adán, poco más del Valencia en ataque pese a ir por detrás en el marcador. Pudo poner las tablas un poco antes con un cabezazo de Mustafi que fue anulado al interpretar Sánchez Martínez, que estaba en fuera de juego. Minutos antes, el colegiado también había invalidado un gol del bético Jorge Molina por el mismo motivo.

Finalmente, ocurrió lo mismo que lleva pasando los últimos tres meses: un nuevo tropiezo que deja al Valencia CF cada vez más cerca de los puestos de descenso. Este equipo se hunde en la tabla y está pidiendo un cambio a gritos. El director deportivo del Valencia CF, Suso García Pitarch, ya está manejando alternativas en el banquillo como Juande Ramos o Joaquín Caparrós por si Peter Lim que es el que tiene la última palabra, decide mover ficha con un técnico que parece haber agotado todo el crédito y paciencia del valencianismo.