VALÈNCIA.  El empate logrado este lunes ante el Rayo Vallecano permitió al Valencia salir de los puestos de descenso a los que cayó justo antes de la llegada a su banquillo de Rubén Baraja, que ha logrado que el equipo abandone las tres últimas posiciones tras cincuenta días y seis encuentros.

El pasado sábado 11 de febrero, el Athletic se impuso por 1-2 en Mestalla y el resto de resultados de la jornada mandaron al Valencia a los puestos de descenso. Tres días después, el martes 14, el club anunciaba la destitución de Voro González, que había perdido los tres encuentros que había dirigido tras la marcha de Gennaro Gattuso, y la llegada de Baraja.

En su presentación, el exjugador del club de Mestalla ya avisó de que costaría salir de esas posiciones y aún más desterrar el peligro de perder la categoría pero se mostró convencido de que lo lograrían, especialmente apoyados en los partidos ante sus aficionados, como así ha sido.

Con el técnico vallisoletano, el Valencia ha disputado seis encuentros y se ha mostrado fuerte en casa pero débil como visitante. En Mestalla ha sumado dos triunfos, ante la Real Sociedad y el Osasuna, y el trabajado empate ante el Rayo Vallecano. Fuera de casa, no ha logrado puntuar, porque ha caído en los campos del Getafe, Barça y Atlético de Madrid.

Los siete puntos logrados, de los dieciocho a los que optaba, han situado al Valencia con 27 en su casillero, los mismos que tienen el Espanyol y el Almería, a los que ha adelantado por tener mejor ‘gol average’ general y a los que ha dejado antepenúltimo y penúltimo respectivamente. Descolgado en la última posición está el Elche con sólo trece puntos.

El equipo de Baraja visita el próximo sábado al Almería en un duelo directo. Si gana abrirá brecha con el equipo andaluz pero además podría llegar a adelantar a Valladolid y al Cádiz (ambos con 28 puntos) y alcanzar al Getafe (que tiene 30). En cambio, si pierde volverá a puestos de descenso tras menos de una semana de liberación.