VALÈNCIA. El Villarreal se enfrentará tras el actual parón de la Liga por los compromisos de las selecciones nacionales a siete partidos clave para posicionarse de cara al ecuador de la temporada, antes del nuevo parón competitivo fijado para mitad de noviembre.

En poco más de tres semanas, el equipo que dirige Unai Emery disputará cinco encuentros de Liga y dos de la Liga de Campeones que pueden resultar clave, especialmente en el caso de la competición continental.

En este capítulo se incluyen los dos encuentros ante el Young Boys suizo en la Liga de Campeones, fijados para los días 20 de octubre a domicilio y 2 de noviembre en La Cerámica.

A estos compromisos se añaden el partido como local ante el Osasuna del domingo 17, que abrirá la serie antes del choque en Suiza, que dará paso a la visita a Bilbao para jugar contra el Athletic, el partido intersemanal en casa contra el Cádiz y el que jugará en Mestalla ante el Valencia para cerrar octubre.

Tras recibir al Young Boys, la serie acabará en el primer fin de semana de noviembre con un Valencia-Getafe.

Se trata de un calendario con tres partidos de Liga en casa en los que debe asegurar los puntos, ya que de no hacerlo, le será complicado acercarse al objetivo de estar metidos en las plazas europeas.

En la Liga de Campeones se la juega, ya que tiene un solo punto de seis tras los dos primeros choques europeos, resueltos con un empate en casa ante el Atalanta y una derrota en la visita al Manchester United.

A todo ello une el Villarreal un partido aplazado ante el Alavés en La Cerámica, cuya fecha no se ha concretado.