VALÈNCIA. Exhausto y feliz. Con las últimas gotas de sudor acariciando su rostro, se dibuja una sonrisa a Roberto Sánchez Mantecón. Tras cruzar la meta, se tumba en el suelo que lo vio nacer y contempla las nubes en un ritual de agradecimiento. Saluda a los lejos con el pulgar hacia arriba a más de un amigo o familiar que, pese a no haber público, buscaron la manera de apoyar a la joven promesa del triatlón nacional. Su octavo puesto en esta Copa del Mundo celebrada en Valéncia confirma que esa promesa es ya una realidad. Segundo español en cruzar la meta detrás de Antonio Serrat (quinto clasificado), el vigente campeón del mundo Sub-23 dio el salto a la élite por la puerta grande. Pese a un inicio de temporada donde costó lograr los resultados que esperaba, Roberto cierra el año en su casa con un octavo puesto más que meritorio. Así nos cuenta sus primeras sensaciones a 'Aros Olímpicos' tras cruzar la meta.

'Ha sido increíble poder correr esta competición de este nivel con los mejores atletas de todo el mundo y hacerlo, además, en casa es un placer. Estoy orgulloso de que València haya acogido esta gran prueba', confiesa.

Sobre el resultado, Roberto no esconde su satisfacción: 'He finalizado octavo y con muy buenas sensaciones realmente. Estoy muy contento por estar dentro del top 10 y poder cerrar este año difícil de la mejor manera. Es un orgullo cerrar el año de esta forma compitiendo aquí en València'.

Como todos, el valenciano no fue ajeno a las dificultades que presentó este 2020 al mundo del deporte: 'Hemos estado entrenando muy duro desde el confinamiento hasta hoy y los resultados no estaban acompañando al inicio de temporada. Por suerte, este cierre de año he logrado dos buenos resultados, tanto hace dos semanas en la Copa de Europa de Barcelona con un quinto puesto y en esta Copa del Mundo, con la octava posición'.