VILLARREAL. No fueron los únicos pero sí los que más disfrutaron de la victoria de su equipo.

Los más de 300 aficionados del Hércules desplazados hasta Villarreal celebraron por todo lo alto el triunfo de los suyos que hace el segundo en dos jornadas y les permite colocarse como colíderes.

Cuatro cursos después los herculanos volvieron a sonreír en las gradas del Mini Estadi de la Ciudad Deportiva del Villarreal donde el Hércules arrastraba una racha de tres derrotas consecutivas, alguna de ellas muy dolorosa como la encajada la temporada pasada en el añadido. Esta vez fueron los blanquiazules los que celebraron un tanto que valía tres puntos en la prolongación, el de Juanjo Nieto que con la inestimable colaboración del mita visitante, puso patas arriba el fondo donde se ubicaban los aficionados del Hércules y al que instantes después no dudaron en dirigirse los jugadores para celebrar con ellos la victoria.