ALICANTE. Un total 150 de entradas al precio de 10 euros pone finalmente el Valencia a disposición de los aficionados del Hércules de cara al encuentro del próximo fin de semana entre el conjunto blanquiazul y el segundo equipo blanquinegro.

El duelo, que arrancará a las 19 horas del sábado y contará con las cámaras de À Punt como testigo, se disputará en el Antonio Puchades cuya taquilla "no abrirá por razones de seguridad con motivo" del mismo. Así lo precisan desde el club che, que por el mismo motivo ha sido invitado por la autoridades competentes a reducir la capacidad de la zona visitante. Se trata de una decisión que guarda relación directa con lo ocurrido en 2018, cuando los aficionados del Hércules se vieron discriminados en la taquilla de la Ciudad Deportiva del Valencia por su procedencia (no se les vendían entradas) y la necesidad del club blanquinegro de asegurar que pueden asistir el mayor número posible de sus abonados (estos tienen incluidos en el abono los partidos del segundo equipo).

Las 150 entradas se distribuirán (venderán) en Alicante a través del Hércules, estando por decidirse de qué manera: ahora mismo lo único seguro es que se dará preferencia a los abonados, especialmente a aquellos que se han asegurado un asiento en uno de los dos autobuses que de cara al envite del sábado fletan Unidad Herculana por un lado y el grupo de aficionados que en las últimas temporadas se une para viajar y asistir a los partidos a domicilio del equipo por otro. Ahora bien, el número de entradas es superior a la capacidad de esos dos autobuses por lo que habrá un pequeño cupo de entradas disponible para su adquisición por aquellos que se desplacen en vehículos particulares.

Además de las citadas 150 entradas, hay adicionalmente varias decenas de cortesía (de intercambio entre los clubes, fundamentalmente para familiares de los jugadores) que no se van a poner a la venta.

El Hércules pidió 200 entradas y el Valencia iba a enviar 100