VALENCIA. Vaya por delante un pequeño detalle: a mi Negredo me cae bien. Y vaya por delante también un segundo detalle: lo fichó a precio de oro Peter Lim, no se fichó Negredo a él mismo. Bien, dicho todo lo anterior, existe una realidad tozuda y absolutamente explicable. Marcelino no quiere tener a Negredo en su equipo y si me apuran yo pienso que a Negredo tampoco le apetece demasiado seguir enrolado mucho más tiempo en las filas del conjunto blanquinegre. La solución parece fácil pero es complicada. Su futuro huele a fútbol inglés por los cuatro costados y su presente es un fiel reflejo de la cara del tipo que ha comprado el Valencia. Fichar en su día a Negredo por una millonada es de locos e ignorantes. Y sí, ese fue y es Peter Lim, y por sus manos pasa el futuro del Valencia.

ALGUNOS APUNTES

Miren, les voy a ser franco, tanto Marcelino como Negredo saben lo que quiere el otro y por esa parte existe coincidencia. Marcelino no lo quiere en su equipo -buena decisión- y Negredo tiene muy claro que tiene contrato en vigor y una ficha disparatada de precio que no piensa perdonar bajo ningún concepto... y yo tampoco lo haría. Eso quiere decir, resumiendo, que estando así las cosas se intuye una cesión o un regalo a cualquier equipo de la Premier con cobrar ni un mísero eurito. Haciendo así las cosas ganará Marcelino, ganará por supuesto también Negredo y quedará como vergonzante el fichaje y el precio que Lim pagó en su día.

FOTO DEL PRESENTE

Y el tema está así: Marcelino mueve el cielo y la tierra para que le fichen al menos un central y un número 6 -medio centro defensivo- y Peter Lim parece un desaparecido en combate incapaz de dar un paso al frente con un mínimo de raciocinio. Y sí, la foto de todo este percal tiene un claro protagonista que no sabemos muy bien hacia donde va... pero lo que sí sabemos es que nunca va o viene por Valencia. Hablo de Peter Lim y su absurda forma de manejar el fútbol europeo. Un nuevo rico que no ha parado de meter la pata. Y sí, la mejor todo que podemos buscar para ilustrar el engaño del poderoso hombre de Singapur no es otra que una colgado del brazo de Negredo. Su fichaje es una forma clara y rotunda de definir a un tipo tan inútil como Peter Lim. Y repito, Negredo no tiene la culpa... él no se paga este dantesco y gigantesco sueldo.