MURCIA. A la final de las Nitto ATP Finals por primera vez en sus tres participaciones y buscará el título frente al italiano Jannik Sinner en su casa. Carlos Alcaraz Garfia se impuso al canadiense Felix Auger Aliassime por 6-2 y 6-4 en 1 hora y 23 minutos y peleará por la Copa de Maestros en Turín. Será a las seis de la tarde de este domingo en el mejor duelo que el planeta tenístico puede ofrecer y ofrece con cierta asiduidad, un espectáculo entre el número 1 del mundo, que es el murciano, y el 2.

Ese choque se dará después de un meritorio triunfo de Carlos frente a un especialista en superficie rápida y que llegaba en muy buena forma -este año fue campeón en los ATP 250 de Adelaida, Montpellier y Bruselas y viene de ser finalista en el Masters 1.000 de París hace menos de dos semanas-. El de estas semis era el octavo duelo entre el de El Palmar, de 22 años, y el de Montreal de 25 y que ocupa el octavo puesto del ranking internacional, en el circuito y el cara a cara arrojaba un 4-3 a favor de Carlos -ya es un 5-3-. Los tres primeros se los llevó Felix pero los cuatro siguientes depararon sendos triunfos del líder de la ATP, el último de ellos en otras semifinales, las de los Juegos Olímpicos de París 2024 y aquel 2 de agosto del pasado año se registró un doble 6-1 que no dejó lugar a dudas. 

CA comenzó el partido con gran determinación sobre la pista dura y bajo techo del Inalpi Arena y, tras llevarse su primer turno de saque, tuvo tres bolas de break al resto con un 0-40. Sin embargo, su rival reaccionó para levantarlas y estableció el 1-1 con el primer ace del choque. El palmareño mostraba más autoridad a la hora de echar la bola al aire y siguió amenazando cuando lo hizo Auger Aliassime. En su quinta opción de ruptura logró su propósito e instaló el 3-1 en el marcador del estadio turinés.

Sin embargo, el pupilo de Juan Carlos Ferrero y Samuel López cometió un par de errores que otorgaron a su contrincante su primera opción de quiebre (30-40). No se descompuso y salió del apuro a base de solidez y obligando a Felix a ser él el que fallara. El norteamericano obtuvo su segundo juego, el primero en blanco de la noche, pero Carlos, con confianza y sintiendo bien la bola, replicó del mismo modo para conseguir el 5-2 con el que era su segundo ace. No se detuvo y repitió lo mismo al resto para cerrar el set después de 37 minutos de superioridad.

El español iba lanzado -suyos fueron los ocho últimos puntos de la primera manga- y quiso seguir igual en la segunda. Continuó sumando de forma segura al iniciar el juego y, aunque FAA, respondió cuando le tocó a él lo cierto es que el marcador reflejó un 1-1 y un 2-2 pero con la sensación de que Alcaraz lo tenía bajo control. El saque-volea le funcionaba y así logró el 3-2 y el 4-3 a pesar de cometer algunos errores que podían hacer creer en sus opciones al jugador que tenía enfrente.

Felix había subido su nivel claramente y el partido se equilibró muchísimo, tanto que se sucedieron las igualadas sin que apareciera ni una sola  bola de break en este parcial. El murciano no estaba dispuesto a ceder la iniciativa, consciente de que hacerlo, prácticamente le abocaría a tener que disputar el tercer set.

El 5-4 lo obtuvo en blanco y rematando con una gran derecha cruzada. Con ese resultado fue a sentarse a su silla y en el rato que tuvo para descansar también visualizó lo que tenía que hacer... Lo pensó y lo ejecutó. Se colocó 0-30 frente a un rival al que se le vio dudar y fue a por él. Dispuso de un 15-40 y eso eran dos bolas de partido, dos bolas de final. En la segunda de ellas otro golpe que se le fue ancho al canadiense puso fin al choque tras otros 46 minutos y con un 62-46 a favor del líder de la ATP en el puntaje global.

Alcaraz, quien previamente había ganado al australiano Alex de Miñaur por 7-6 (5) y 6-2, al estadounidense Taylor Fritz con más apuros por 6-7 (2), 7-5 y 6-3 y al italiano Lorenzo Musetti por 6-4 y 6-1, estará en la final de este domingo frente a Sinner, los dos mejores tenistas del mundo frente a frente en su decimosexto enfrentamiento en el circuito. El palmareño domina por 10-5 pero el encuentro será en Italia, en pista dura y bajo techo, condiciones en las que el de San Cándido acumula nada menos que 30 triunfos seguidos. Es un reto mayúsculo pero ya se sabe que a Carlos le van estos desafíos.