VALÈNCIA. Quique Llopis es uno de los puntales de la selección española que este fin de semana, de jueves a domingo, disputa el Campeonato de Europa de pista cubierta en el Omnisport Stadium de Apeldoorn, una pequeña ciudad situada en el centro de los Países Bajos. El valenciano, que ha viajado junto a su entrenador, Toni Puig, afronta su cuarto Europeo ‘indoor’ con solo 24 años. El último, en Estambul, en 2023, le dejó un mal recuerdo. Llopis sufrió una aparatosa caída en la final de los 60 metros vallas y permaneció varios minutos tendido en el suelo. Después fue trasladado e ingresado en un hospital de la ciudad turca, donde permaneció 24 horas en observación. Pero de esa caída emergió un atleta mejor todavía. El de Bellreguard se puso a trabajar con una psicóloga, Davinia Albinyana, y con mucho entrenamiento y cuidando mucho cada detalle de su preparación acabó convirtiéndose en uno de los mejores vallistas del mundo.
Su confirmación llegó en 2024. Esa temporada comenzó con la medalla de plata en el Europeo al aire libre de Roma y acabó con el cuarto puesto de la final olímpica de los 110 metros vallas. Ahora, solo unos meses después de aquella carrera en París, Llopis llega como uno de los favoritos al podio e incluso al título. Él mismo, nada más proclamarse campeón de España hace dos semanas en Madrid, aseguró que no firmaba una medalla de bronce. “Soy ambicioso y yo voy a salir a por el oro”, dijo. Luego compitió en el World Indoor Tour de Madrid, nuevamente en la pista de Gallur, e igualó dos veces el récord de España de 7.48 que comparte con Orlando Ortega desde el año pasado.
Llopis llega cuarto en un ranking europeo del año en el que solo el polaco Jakub Szymanski ha bajado de 7.40 (7.38). Por detrás están el suizo Jason Joseph (7.45), el francés Wilhen Belocian (7.46) y el español (7.48). Este jueves son las series (21:20 horas), y el viernes, las semifinales y la final (21:53).
Este jueves debutará con la selección española Lester Lescay, un atleta cubano nacionalizado español y castellonense de adopción. El saltador de longitud, que tiene una marca personal de 8,35 al aire libre, logró el pasaporte español después de casarse con una mujer de Burriana. Lescay ahora vive entre Castellón y Guadalajara, donde entrena en el grupo de Luis Felipe Méliz. Su temporada de invierno no ha sido excelente y todavía no ha podido superar los ocho metros (7,95). La marca que se pide para pasar a la final es de ocho metros o los ocho mejores clasificados.
La tercera atleta de la Comunitat es Fátima Diame. A la valenciana, que también se entrena en Guadalajara, pero con Iván Pedroso, le ha tocado convivir este invierno con unas molestias en el talón. Eso le obligó a dejar de batir con la pierna derecha y saltar con la izquierda. Cuando era más joven, su anterior entrenador, Rafa Blanquer, le enseñó a hacerlo mejor y eso ha evitado que el cambio sea muy traumático, aunque no deja de saltar con el pie menos favorable de los dos. Este contratiempo ha hecho que esta temporada solo haya podido saltar 6,59 (décima del ranking). Si quiere estar en la final del sábado necesita saltar 6,65 en la clasificación o acabar ese concurso entre las ocho mejores, el número de atletas que pasará a la final de longitud.
