ALICANTE. El Hércules, con su cuerpo técnico a la cabeza, no quiere arriesgar con César Moreno.

El futbolista se va a someter "a una prueba de control" para confirmar que la rotura de fibras que le ha mantenido fuera de los terrenos de juego las cuatro últimas jornadas es agua pasada. 

El mediocentro cartagenero se lesionaba en la visita al Ebro de la jornada 23 y aunque no hubo parte médico oficial, el club sí trasladó de manera oficiosa que sufría una dolencia de naturaleza muscular y que el tiempo de baja rondaría, como mínimo, "las tres o cuatro semanas". El pasado miércoles César inició la búsqueda del alta competitiva, si bien desde el Hércules advertían ya dos días antes que el futbolista no viajaría a Manresa "por precaución". 

Pues bien, la misma se mantiene esta semana y de ahí la citada prueba de valoración (la tarde de este lunes todavía no se había decidido si se realizará el martes o el miércoles). En función del resultado de la misma y de cómo complete César Moreno la semana (desde las oficinas de Foguerer Romeu Zarandieta advertían que en el mejor de los casos "llegaría muy justo" para obtener el alta competitiva), Escobar puede echar mano de él o no de cara a la enésima final.