ALICANTE. La opinión sobre el pésimo estado del terreno de juego del estadio Manuel Martínez Valero el pasado sábado no es unánime.
El árbitro encargado de dirigir el encuentro que enfrentó al Elche con el Fuenlabrada, el baracaldés Jon Ander González Esteban, no dudó en eregirse en verso suelto al consignar en el acta del partido, en el apartado relativo a "deficiencias observadas en el terreno de juego e instalaciones" que no hubo "ninguna".