ELCHE. "No es fácil asimilar este empate después del partido", decía el técnico del Elche, Alberto Toril después de que su equipo perdiera dos puntos en el minuto 93 de partido, al encajar un gol de penalti tras desperdiciar "cuatro ocasiones para hacer el dos a cero".

"El partido fue para ganar sin problema (...) vi el partido tranquilo porque estaba controlado" añadía el entrenador cordobés que apuntaba a que "si se pitara cada agarrón, habría 500 penaltis en cada partido" y recordaba que "el fútbol es un deporte de contacto" en relación con la pena máxima señalada a Armando aunque también apuntaba que si el árbitro pintó pena máxima es que "lo debió ver claro".

Toril que alabó el trabajo realizado por Borja Valle y Túñez, optaba finalmente por ver el vaso medio lleno. "Tenemos un punto más, hay que mirar lo positivo. Hay que conseguir puntos y ya veremos hasta dónde llegamos".