VALÈNCIA. El Valencia CF afronta este sábado su cuarto amistoso de pretemporada ante el Borussia Mönchengladbach, un nuevo test exigente para seguir afinando el equipo antes del debut liguero. Tras la mejoría mostrada frente al Olympique de Marsella, los de Carlos Corberán buscarán refrendar las buenas sensaciones y, de paso, estrenar su casillero de victorias este verano.
El gran atractivo del partido será el debut de José Copete, el último fichaje hasta la fecha. El central andaluz, que llegó procedente del Mallorca, ya se ha integrado en la dinámica de grupo y todo apunta a que disputará sus primeros minutos con la camiseta blanquinegra.
En cuanto al reparto de esfuerzos, se espera que los teóricos titulares sigan acumulando minutos, mientras que los canteranos volverán a tener protagonismo en la segunda parte, como ya sucedió ante el Marsella. Futbolistas como Núñez, Pablo López u Otorbi podrían volver a tener participación, aunque el foco estará puesto en seguir consolidando automatismos con los hombres llamados a iniciar la temporada en el once.
El principal objetivo será dar continuidad al crecimiento visto en el último encuentro, donde el equipo ofreció una imagen más competitiva. Aun así, la asignatura pendiente sigue siendo el gol: en los tres partidos disputados, el Valencia solo ha anotado dos tantos, uno de penalti y otro tras una acción individual.
El Borussia Mönchengladbach, por su parte, llega más rodado y con ritmo de competición, tras haber disputado cinco amistosos, saldados con cuatro victorias y una única derrota. El conjunto alemán ha superado al Eintracht Rheine, Neunkirchen, Erzgebirge Aue y Nürnberg, mientras que su única caída fue un 1-3 frente al Metalist Kharkiv ucraniano.
Con solo dos ensayos más por delante antes del inicio liguero, el margen para hacer ajustes se reduce. Y aunque en pretemporada el resultado no lo es todo, sumar una victoria daría un impulso anímico importante para afrontar con mayor confianza la recta final del verano.