VALÈNCIA. Meses clave en las oficinas del Valencia Club de Fútbol. El último 'sprint' liguero ha dejado a los de Corberán lejos del descenso con varias jornadas de antelación y solo una clasificación para Europa podría modificar los planes del club a corto y medio plazo en cuanto a la planificación deportiva. 

Una planificación, todo sea dicho, que todavía está pendiente de la luz verde que no ha llegado desde Singapur. Sí que hay alguna decisión que se puede empezar a trazar, como es el caso de renovaciones concretas, pero el grueso de las mismas no se pueden llevar a cabo con un poco de margen. En esas se encuentran los futbolistas que acaban contrato en unas semanas, como Jaume Doménech o Dimitri Foulquier, cuya vinculación con los che termina el 30 de junio de 2025.

Ambos jugadores son importantes para Carlos Corberán, el primero en el vestuario y el segundo en el césped, y el de Cheste no pondría pegas en caso de que los dos continuaran. De hecho, ya ha mostrado predilección absoluta por el lateral en varias ocasiones. Por ello, los de Mestalla le han prometido al futbolista que a final de temporada se sentarán para negociar, algo que a principio de la misma parecía inviable. Diferente caso es el de Jaume, uno de los capitanes del equipo, ya que el club no ha acelerado su continuidad como sí ha ocurrido en temporadas atrás, lo cual parece indicar que puede ser la última de 'El Gat d´Almenara' como che. 

Por un lado, en el saco de las cesiones hay varias decisiones ya enfocadas que deportivamente saltan a la vista: Max Aarons, Rafa Mir e Iván Jaime van a tener muy difícil que el club considere pelear su contratación, cada uno con sus particularidades: el lateral no ha cuajado ni se ha adaptado al grupo y volverá a Inglaterra. Por su parte, Iván Jaime se ha lesionado en un tramo de temporada importante y no ha participado lo suficiente como para llegar a pensar que el club vaya a gastarse cerca de siete millones por él. Por último, Rafa Mir podría tener alguna opción siempre y cuando rescinda contrato con el Sevilla, pero ya es mucho decir y ello se iría más allá de julio.

En otra situación se hallan Enzo Barrenechea y Umar Sadiq. Por el argentino los che intentarán acometer otra cesión que dependerá mucho del Aston Villa, club de procedencia del mediocentro. Por otro lado, el nigeriano tiene todavía partidos por delante para terminar de convencer a Singapur, que tendrá la última palabra en una operación que todos en el club quieren llevar a cabo, eso sí, previo acuerdo salarial con él. 

Por último, hay que comenzar a observar detenidamente el panorama que tienen los jugadores que finalizan su andadura en Valencia en junio de 2026. El caso más llamativo es el de Thierry Rendall, considerado el lateral derecho titular y que está inmerso en el proceso de recuperación de su lesión grave de rodilla. Su vuelta marcará la posible renovación de un jugador que en caso contrario deberá salir este mismo mercado. Hugo Guillamón y Jesús Vázquez también cuentan con serias opciones de salir este verano, ya que ambos son de los 'olvidados' de Corberán en la rotación.

Distintos casos son los de Fran Pérez o Stole Dimitrievski, puesto que el Valencia CF quiere contar con el extremo más allá de 2026 y parece lógico que el guardameta y el club hagan efectiva la opción de prolongar dos años más su contrato, tal y como tienen estipulado. Si todo sigue así, con Luis Rioja también se añadirá el 'más uno' que hay en su contrato. 

Caso aparte es el de Cristhian Mosquera. Sin duda, el central del club che parece la venta más clara en este mercado de traspasos ante las diferencias que hay para renovar su contrato. Finaliza en junio de 2026 y el Valencia CF tendrá que hacer caja si en unas semanas no se dan la mano para continuar, un hecho que hoy parece muy improbable.