VALÈNCIA. El Valencia de Carlos Corberán llega al primer parón con 4 puntos de 9 posibles. Un tiempo que debe servir para que todos los jugadores, especialmente los últimos fichajes, terminen de aclimatarse. El técnico lo dejó claro en la rueda de prensa tras el partido: “Debemos aprovechar este espacio de tiempo del parón para el trabajo. Ha habido jugadores nuevos que se han ido incorporando y necesitan coger el ritmo, coger ideas. Va a ser provechoso para el crecimiento del equipo”.

El conjunto valencianista encara ahora dos semanas para recuperar fuerzas y acelerar el proceso de adaptación de las nuevas incorporaciones de cara a poder llegar al domingo 14 en la mejor condición para visitar al FC Barcelona.

Las nuevas piezas del puzle

El primero en llegar fue Dani Raba, libre tras acabar contrato con el Leganés. Desde el inicio de la pretemporada ha estado a las órdenes de Corberán y ha participado en los tres encuentros, siendo titular en dos de ellos. En Pamplona quedó condicionado por la temprana expulsión de Gayà y frente al Getafe perdió la titularidad, pero apunta a ser un jugador importante durante el curso. 

En la portería, el club cerró la cesión con opción de compra de Julen Agirrezabala tras una larga negociación con el Athletic. El guardameta se ha consolidado de inmediato como titular en Mestalla, disputando los tres partidos y encajando solo dos goles. En segundo lugar llegó Copete, que empezó como titular y es una de la apuestas del verano ya que se pagaron 3,6 millones por él. 

En la semana más intensa del mercado, la del Trofeu Taronja, llegaron tres caras nuevas. El primero fue Baptiste Santamaria, fichado en propiedad desde el Stade Rennais. El francés, único ‘6’ puro de la plantilla, necesitó dos partidos de adaptación, pero frente al Getafe completó los 90 minutos con un rendimiento muy serio. Todo apunta a que será un hombre fundamental en el esquema de Corberán. El segundo en llegar esa semana fue Filip Ugrinic .El suizo, elegido mejor jugador de la liga suiza en 2023/24, se incorporó por 3,5 millones desde el Young Boys. Aporta fondo de armario y polivalencia, pudiendo actuar como ‘8’, mediapunta o en banda. Una contusión lo apartó del último encuentro, pero aprovechará el parón para recuperarse y estar listo ante el Barça.

El tercero de esa semana fue Arnaut Danjuma, un refuerzo llamado a marcar diferencias. Ya suma dos titularidades y un gol en Liga, y si Corberán consigue devolverle la versión que ofreció en el Villarreal, el Valencia ganará un salto de calidad ofensivo considerable.

Ramazani, impacto exprés; Beltrán, tiempo para aclimatarse

En el tramo final de mercado llegaron Largie Ramazani y Lucas Beltrán. El extremo belga debutó con apenas un entrenamiento y asistió a Hugo Duro en el tercer gol frente al Getafe. Estas semanas servirán para que termine de integrarse en el grupo y en el plan de juego. Por su parte, Lucas Beltrán aterrizó cedido desde la Fiorentina en las últimas horas del mercado. El argentino, de 24 años, no compite en partido oficial desde mayo y necesitará este parón para coger ritmo y empezar a disputar la titularidad a Hugo Duro en la delantera.

Con ocho refuerzos, el Valencia se enfrenta a un parón que será importante ensamblar piezas, fijar automatismos y seguir construyendo un bloque competitivo capaz de dar la cara en escenarios exigentes como el que le espera en Barcelona.