CASTELLÓ. El Castellón llega a las diez últimas jornadas de Liga en la situación que quería Albert Rudé cuando firmó como albinegro. O sea, con opciones de pelear por el ascenso directo. Esta afirmación la ha hecho el técnico en la rueda de prensa de este viernes, en una comparecencia en la que ha tratado de transmitir ilusión y optimismo de cara a la parte decisiva del campeonato.
“Si al principio de la temporada nos dicen que estamos donde nos encontramos ahora, lo habríamos firmado, porque estamos con posibilidades. Todo fluctúa tanto que no sabemos lo que pasará con 30 puntos en juego. Entonces, la ilusión por la primera plaza nos tiene que enchufar a todos”, ha declarado Rudé, quien se ha fijado como objetivo el salto de categoría, independientemente de si se logra por la vía directa o a través de la promoción. “Nuestro foco debe ser el ascenso y si puede ser como primeros, mejor. Si no, en el play off. Pero tenemos que estar preparados cuando llegue el momento de la verdad”, ha subrayado.
Y el momento clave llega ahora, con una fase de competición en la que se decide todo. Ahí es donde el Castellón debe demostrar si está preparado para un reto de esta exigencia. Rudé cree que sí. “El equipo está brutalmente comprometido y consciente de que estamos en un proceso en el que se ha de acelerar y eso, como entrenador, me deja tranquilo”, ha valorado.
El técnico del Castellón ha visualizado el choque que espera este domingo frente al Nàstic de Tarragona. “Tenemos la referencia del partido que jugaron contra el Barcelona B para saber cómo plantean los encuentros fuera de casa. Sabemos que nos pueden apretar en ciertas fases del juego y estamos trabajando en esos aspectos para poder superarlos. Vamos a necesitar estar muy bien y tener el apoyo de nuestra gente, que es muy importante para nosotros”, ha manifestado.
Rudé cree que el Castellón dispone de argumentos para contrarrestar el planteamiento del conjunto catalán. “Es un equipo que te puede presionar o te puede esperar. Si nos buscan, tenemos recursos para atacar con espacios, como hicimos ante el Numancia, y si se nos tiran atrás, también tenemos recursos para abrirlos, como se vio en la primera parte contra el Baleares. Nosotros estamos preparados para ambos escenarios”, ha asegurado.
En lo que no ha sido tan tajante es en el estado físico de los jugadores en una semana “difícil” debido a los problemas físicos y de salud de algunos integrantes de su plantilla. Así, Rudé ha reconocido que “cuatro o cinco futbolistas” sufrieron un problema vírico al comienzo de la semana, mientras que ha mantenido el interrogante de los tocados Borja Granero y Jesús de Miguel. Quien está recuperado es Adrián Fuentes. No así Salva Ruiz, que será baja una jornada más.