Tanto parón en el calendario es malo para los espectadores pero bueno para los jugadores

VALÈNCIA. Parece tonto, pero no lo es. El calendario del fútbol actual es como si a los seguidores de cualquier equipo les pegara un navajazo de esos inesperados -te toca la moral y la pasión si eres hincha de cualquier equipo- en su pasión por el fútbol, pero debemos también mirar a los profesionales de este deporte, a los propios futbolistas, que tienen en el calendario actual de trabajo a un enemigo peligroso y enorme. Si analizamos -y no solo en el Valencia- podemos ver como las lesiones, especialmente musculares, están lastrando de forma muy especial a los propios profesionales. Tanto esfuerzo seguido y a lo bestia es terriblemente negativo para la salud de los deportistas. Así las cosas, y aunque en el fondo me de rabia tanto parón, si estimo que estos parones benefician de alguna manera a los propios futbolistas.

LOS EQUIPOS ENORMES

En esta disyuntiva de trabajar y parar, los únicos que salen beneficiados son los propios jugadores...a los que sí da tiempo a descansar entre esfuerzo y esfuerzo. El fútbol actual se ha convertido en una maquina apisonadora que hace un daño terrible a los equipos y que provoca, de forma directa e indirecta, que los equipos con mayor presupuesto sí puedan gozar de plantillas más amplias y de esa forma competir mejor dentro de cualquier calendario. A más jugadores, más gasto, pero también mayor rendimiento.

EL CASO DEL VALENCIA

El equipo de Bordalás, un entrenador exigente con el trabajo físico de sus propios jugadores recupera la sonrisa ante estos parones que tan a menudo parece condicionar la preparación de los propios equipos. Pensemos en la cantidad de teóricos titulares que el Valencia ha ido perdiendo en estos primeros partidos de Liga y pensemos también a cuántos va a recuperar para la Liga gracias a estos parones tan odiados para los aficionados, pero tan sugestivos para un entrenador como Bordalás que tiene una plantilla muy justita para encarar la principal competición del Valencia que no es otra que la actual Liga.

LOS INTERNACIONALES

Pensemos, en el caso exclusivamente del Valencia, en el trabajo de dos sus internacionales como son Gayà y Soler. Dos canteranos que están rindiendo a un nivel espectacular y que de alguna forma su propio calendario atiborrado de partido había mandado al pero para que se recuperaran de tanto esfuerzo y de tanta lesión surgida de golpe y porrazo.

SU RECUPERACIÓN

Este segundo parón en una competición que acaba de comenzar como es la Liga española parece como una canallada para la evolución de nuestro querido fútbol patrio. Pero la realidad nos indica que no lo es. La realidad es tozuda y esta nos indica que en un calendario cargado e innumerables partidos de fútbol los parones como el parón actual sí sirve para recuperar físicamente jugadores para la causa.

RESUMEN RÁPIDO

Así las cosas, convendrán conmigo en señalar por un lado el caos del calendario actual y por el otro destacar también lo bien que les viene a clubs sin un gran patrimonio de futbolistas estos parones para ir recuperando profesionales para la causa. Y lo de los equipos gigante ya saben ustedes cómo funciona. Más partidos, más trabajo, pero plantillas carísimas y enormes para sí poder hacer frente a estos enloquecidos calendarios.

SOLO UN PENSAMIENTO

De cara al futuro no estaría mal que los padres de la criatura, esos que dan a luz calendarios tan enloquecedores, pensaran bien en que están convirtiendo el fútbol actual y que pensaran también en que los futbolistas no son máquinas con un fondo físico perfecto a los que conviene explotar sin parangón en la actualidad. Pensemos. Un esfuerzo gigante es una canallada para el fútbol. Y sinceramente, aunque ahora nos beneficiemos de esos parones no estaría de más que el fútbol viviera inmerso en calendarios razonables. A tal esfuerzo tales partidos...y no más.