VALÈNCIA. Tres millones de euros separan a Maxi Gómez de firmar definitivamente por el Valencia CF. El importe corresponde a la cantidad que el West Ham United está dispuesto a destinar para premiar a Stellar Group, la agencia de representación del jugador, como pago de las comisiones de la operación.
Si el Valencia iguala esa cantidad, Stellar Group Limited desbloqueará el traspaso y el punta de Paysandú será nuevo jugador del Valencia. La decisión de Maxi Gómez, después de sopesar ambas ofertas, es la de jugar la Liga de Campeones con el Valencia. El tanque uruguayo prioriza el proyecto deportivo antes que los millones de la Premier League. Su opinión ha decantado la balanza hacia los de Mestalla.
El movimiento con Maxi provocará que Santi Mina pase a formar parte de la plantilla celeste junto a Jorge Sáenz, cedido, y que la cifra de 14 millones de euros más 1'5 en variables ingrese en la cuenta corriente del Celta.
El presidente y fundador de Stellar Group es Jonathan Barnett, el agresivo agente que representa al futbolista galés del Real Madrid Gareth Bale. La comisión que exige es la que está paralizando el fichaje.
Representantes del West Ham United están en Vigo desde el jueves por la tarde con una oferta millonaria por Maxi que supera los 40 millones de euros y se acerca a la cláusula de rescisión de 50 kilos. Su intromisión en la operación dinamitó un traspaso que estaba a punto de cerrarse en ese momento a falta de perfilar la cesión, por una o dos temporadas, de Jorge Sáenz, del que el Tenerife tiene el 50% de los derechos. A falta de fijar cláusulas en esa cesión, como la potestad de anularla por ambos clubes al término del primer año, el acuerdo estaba encarrilado.
El Celta se encuentra en una encrucijada ya que ambas operaciones le convienen. Carlos Mourinho y Antonio Chaves, presidente y director general del Celta, respectivamente, entienden que cerrar el acuerdo con el Valencia les facilita la llegada de Santi Mina sin tener que negociar un pago más alto con un Valencia enojado por perder a Maxi. Aceptar las libras esterlinas inglesas les llena la cuenta corriente.
El movimiento entre clubes continúa. Mouriño y Chaves están pidiendo la cláusula de rescisión de Maxi Gómez a los dirigentes hammers que, de momento, no llegan a esa cifra. Mientras, Mateu Alemany estudia pagar los tres millones correspondientes a la comisión que piden los agentes del uruguayo en varios plazos y repartidos por los años de contrato, cuatro o cinco temporadas, que el Valencia tiene previsto ofrecerle al delantero. La voluntad del uruguayo de jugar en Mestalla ha sido decisiva para que el club haga ese último esfuerzo económico.