Un jugador ofensivo y polivalente que no llegó

VALÈNCIA. El cierre de mercado trajo consigo una de las decepciones de Marcelino para la confección de la plantilla esta temporada. El cuerpo técnico quería contar con un futbolista polivalente en ataque, capaz de jugar en varias posiciones y que conociese el fútbol español. 

El cuerpo técnico y la dirección deportiva propusieron los nombres de Denis Suárez y Rafinha. Sin embargo, ambos han acabado cedidos en el RC Celta de Vigo por las injerencias derivadas a nivel interno. En el caso del gallego, contaba con el beneplácito de Marcelino, pero su llegada fue descartada por malos informes sobre su vida fuera de los terrenos de juegos.

Esa decisión irritó a Denis Suárez, que cargó contra la dirección deportiva del Valencia CF por dudar de su profesionalidad durante su presentación como nuevo jugador del Celta de Vigo. "En ese aspecto me ha decepcionado un poco la dirección deportiva que tiene el Valencia porque no ha creído en mí. No como futbolista. Ha dudado de mí en aspectos extradeportivos y no estoy dispuesto a consentir eso porque se duda de mi extradeportivamente cuando yo siempre he sido un chico profesional, que dedica todo el tiempo al fútbol y a cuidarme y eso me ha dolido", aseguró.

Respecto a Rafinha, ha sido el nombre más polémico del verano sin dudas. El Valencia tenía acordado el 'sí' del futbolista desde hace dos meses, pero Peter Lim no veía con buenos ojos la operación teniendo que desembolsar 15 millones de euros tras su largo historial de lesiones. La propiedad puso en la mesa la figura de Nabil Fekir, pero fue descartado por este motivo y acabó fichando por el Betis. Un argumento que alimentó todavía más las injerencias entre la dirección deportiva y la propiedad. Además, Peter Lim consideraba que la llegada de Rafinha era un hándicap para la progresión de jóvenes valores de la cantera como Ferran Torres y Kang In Lee.

No obstante, parecía que todavía quedaba un atisbo de esperanza para Marcelino: que Rafinha llegara cedido. Así lo explicó en rueda de prensa, pero Peter Lim tampoco dio su brazo a torcer. El centrocampista del FC Barcelona se ha marchado finalmente a préstamo al Celta tras renovar un año más con el club azulgrana. Un movimiento que deja al Valencia sin el futbolista ofensivo polivalente que quería Marcelino para mejorar el rendimiento del equipo en la zona de tres cuartos.