VALÈNCIA. El fichaje interminable, así podría titularse la llegada de Sergi Canós al Valencia CF en este verano del 2023, con unas condiciones económicas bastante simples y con la voluntad del jugador inquebrantable por llegar a vestir la camiseta del club de su corazón.
Tras más de un mes esperando al Valencia CF el túnel parece ver la luz con la salida, ésta es otra historia, de Yunus al AC Milan, con los 20 millones de euros que entrarán en las arcas del club de Mestalla.
El jugador ha realizado un ejercicio de aguante propio de un triatlón y sigue esperando a que el Valencia CF acelere por su contratación y convenza al Brentford de que el jugador de Nules salga gratis de las islas.
Con el jugador entregado a la causa, el Valencia CF se ha limitado a esperar su oportunidad para no tener que pagar ni un euro, algo que, desde el pasado 27 de junio, no ha pasado.
En total, más de un mes de espera en el que el propio jugador, y su familia, han pedido el 'SOS' al Valencia CF en forma de mensajes, como el del jugador en una camiseta en una foto de Instagram pero un salvavidas que todavía no ha llegado.
Desde el club son optimistas para su llegada pero la realidad es que el extremo todavía no ha podido vestirse de valencianista a falta de una semana para que empiece la liga en el Sánchez Pizjuán.
Su deseo de regresar 'a casa' no es nuevo, incluso en el pasado mercado de invierno ya se puso sobre la mesa del Valencia CF pero terminó saliendo cedido a Olympiakos.
El sueño de Canós podría hacerse realidad pronto, con unas pretensiones económicas mínimas por parte de 'las abejas' pero a las que el Valencia, de momento, no está dispuesto a llegar.