Una jornada menos para acabar la liga

VALENCIA. Una jornada menos para acabar la Liga y ya solo quedan tres para que el aficionado del Valencia CF ponga fin a otra temporada de sinsabores que termina muy lejos de las posiciones en las que debe estar el cuadro valencianista, algo que Mateu Alemany afirma que se solucionará el próximo año.

Ante el Real Madrid, el Valencia CF volvió a caer derrotado como suele ser habitual fuera de casa ya que el equipo únicamente ha sumado cuatro puntos en ocho encuentros disputados lejos de Mestalla en esta segunda vuelta, aunque en el Santiago Bernabéu el combinado valencianista mostró una mejor imagen que la vista en los dos últimos partidos.

Los duelos entre el Real Madrid y el Valencia CF solían estar marcados por la rivalidad y por los puestos de privilegio en la competición, pero como ya sucediera la pasada temporada, el equipo de Voro visitó el estadio blanco con el único aliciente de hacer perder puntos al equipo de Zidane para entorpecer su lucha por la Liga.

Y a punto estuvo de hacerlo, pero finalmente el Valencia CF mostró una de las grandes carencias que le han lastrado durante la temporada y es la falta de gol. Este hecho se intentó solucionar con la llegada de Zaza, pero el italiano no estuvo en el estadio madridista por sanción y el equipo lo notó puesto que gozó de buenas ocasiones en la primera mitad para poder haber cambiado el signo del partido pero la diferencia de pegada ejecutó el resultado.

Dos claras ocasiones en las botas de Mina y Orellana tuvo el Valencia CF en los primeros minutos pero no acertó, algo que sí hizo Cristiano Ronaldo. Si al delantero portugués le dejas rematar a placer en el centro del área no perdona y así lo hizo ante la pasiva mirada de Garay y Diego Alves, que fueron espectadores de lujo del tanto madridista.

Precisamente Diego Alves mantuvo al Valencia en el partido tras detener un penalti inventado por Gil Manzano. Como es habitual, el colegiado realizó un arbitraje partidista cargando de tarjetas al Valencia CF y permitiendo el juego del Real Madrid, centrado en un Casemiro que tiene licencia arbitral para poder cometer las faltas que quiera.

El árbitro quiso aportar la tranquilidad al Real Madrid que no conseguía en el césped con un penalti al poco de comenzar la segunda mitad que hubiera sentenciado el encuentro, pero el brasileño desbarató los planes de los presentes y puso el nerviosismo en el campo, que se acrecentó con el gol de falta de Parejo en el tramo final, que hizo sobrevolar los fantasmas en el estadio blanco.

Pero como es habitual también en el Valencia esta campaña, los minutos finales volvieron a castigar a los de Voro, que son incapaces de mantener un resultado cuando el rival se vuelca sobre la portería de Alves que solo pudo aguantar tres minutos con empate en el marcador antes de que Marcelo hiciera el segundo.

El choque dejó dos notas positivas, una fue el regreso de Rodrigo tras su lesión de tobilla y la otra el crecimiento de Carlos Soler y Lato que no se arrugaron en el escenario y fueron capaces de dar un paso al frente para ser los mejores de un Valencia descafeinado que ya espera al final de Liga. Quedan tres jornadas.