ALICANTE. Si no media cambio en los próximos meses, Rubén Alfaro será el futuro secretario general del PSPV en la provincia de Alicante, en sustitución de Alejandro Soler. Su nombramiento parecía claro, y solo cuestión de programarlo en tiempo y forma para que no generara conflicto con el cónclave que los socialistas valencianos celebran este fin de semana en València y que dejará manos libres a Diana Morant para conformar su equipo de confianza.
La elección de Alfaro parecía clara desde hace meses. La principal razón es porque es la persona de confianza de Morant y porque Soler ya acumulaba dos mandatos y nuevas responsabilidades, como miembro de la ejecutiva federal, además de presidente del PSPV y secretario general de la agrupación de Elche. Pero al parecer a Soler le había entrado el gusanillo en los últimos días de volver a repetir un tercer mandato al frente de la organización provincial, algo que en principio tenía el aval del secretario de Organización federal, Santos Cerdán, pero que no había sentado bien al entorno de Morant, y por supuesto, menos al de Rubén Alfaro. Sin embargo, la intentona de Soler ha tenido un recorrido corto. Según ha podido saber Alicante Plaza, el propio Cerdán le habría transmitido en las últimas horas la inconveniencia de cumplir sus deseos -para no incomodar a la propia Morant- y que en todo caso optara a ser presidente del PSPV provincial de Alicante, un cargo a priori honorífico. Pero que deja una tarea más al futuro secretario general, que debe mantener las cuotas de paridad en los principales cargos. Y en caso de ejecutarse de esta manera, obligaría a Alfaro a buscar un perfil femenino para la secretaría de Organización.
Sea como fuere, lo único que parece claro es que Alfaro será secretario general del PSPV provincial de Alicante. Y que además podría seguir con un papel destacado en la futura dirección del PSPV. En la actualidad, es su portavoz. Una vez celebrado el cónclave de València, vendrán los congresos provinciales y ahí es donde Alfaro y Soler deberán negociar la composición de su futura ejecutiva. No es óbice que a Elche le gustaría mantener la secretaría de Organización, algo que también choca con los deseos de Soler de ser presidente. En algo tendrá que ceder en el propósito de Alfaro de hacer su propio equipo. Y a todas esas, falta también por saber qué encaje tiene la agrupación de Elche dentro del futuro organigrama del PSPV.
