VALÈNCIA. El base del Valencia Basket Sam Van Rossom admitió que la semana pasada en los encuentros ante el Virtus Bolonia y el Lenovo Tenerife no estuvieron “nada bien” pero añadió que el equipo tiene “capacidad de reacción”.
“Viene una semana difícil, con tres partidos y duros y tras dos partidos en los que no hemos estado nada bien. El equipo quiere reaccionar con tres partidos en casa y haciendo mejor las cosas”, señaló Van Rossom, que antes de recibir este martes al Madrid en la Euroliga apuntó que no ha habido una sola causa para esta mala racha.
“Hay cosas que influyen. Hay jugadores que pueden estar un poco mejor o peor pero, sobre todo, es problema de estar más metidos. De estar centrados. Los equipos salen al 100% y si tú no lo estás, cuando te has dado cuenta vas diez abajo en el marcador y luego cuesta mucho remontar, señaló en un acto en el que el club y la cervecera San Miguel renovaron dos años un acuerdo de patrocinio que arrancó en 1998.
“Sabemos de la dificultad de la temporada, de combinar Euroliga y ACB, y que va así. Que tienes dos partidos malos y luego vas mejor. A todos los españoles de la Euroliga les está costando la ACB”, reflexionó.
Van Rossom apuntó que deben buscar “la confianza” en los dos lados de la pista. “Nos afecta bastante no meter y que nos metan fácil. Es algo que tenemos que empezar a controlar. Ya lo hemos hecho, sabemos cómo hacerlo y hemos de volver al buen camino de la semana anterior. El equipo tiene capacidad de reacción”, insistió el belga que dijo estar bastante recuperado de sus molestias en la rodilla derecha aunque admitió que no han desaparecido y que es algo que hay que manejar.