VALÈNCIA.  El defensa del Levante Rubén Vezo cumplirá este sábado 25 de abril 26 años y lo hará pendiente del inminente regreso a los entrenamientos tras la suspensión de LaLiga por el COVID-19 el pasado mes de marzo, momento en el que el zaguero portugués peleaba por consolidar su puesto en el once inicial.

Vezo volvió a la titularidad en el último partido de competición jugado por el Levante el pasado 8 de marzo, ante el Granada (1-1) en el estadio Ciutat de València, tras haberse perdido los encuentros ante el Real Madrid y el Eibar por decisión técnica.

A pesar de que el entrenador del Levante, Paco López, se limitó a decir públicamente que prescindió del luso de las convocatorias por cuestiones deportivas, el portugués fue castigado por su entrenador por encontrarse en baja forma física y tras no haber superado los controles de peso en varias ocasiones durante la temporada.

Desde su llegada al equipo en el mercado de invierno de 2019 cedido desde el Valencia, Vezo se convirtió en una pieza indispensable para Paco López. Jugó quince partidos en el tramo final del curso 2018-19 y el Levante, convencido de que podría ser su jugador franquicia para la zaga, pagó unos cinco millones de euros por él al club de Mestalla.

Sin embargo, su rendimiento este curso ha sido discreto y lejano al exhibido en su primera experiencia como levantinista. El portugués, a pesar de todo, ha jugado esta temporada diecinueve partidos en LaLiga y es el segundo central más usado por detrás de Sergio Postigo y el décimo futbolista de la plantilla que más minutos acumula.

Vezo, con contrato en el Levante hasta el próximo mes de junio de 2024, fue operado el pasado 5 de diciembre de 2019 de una rotura en el menisco externo de la rodilla izquierda y estuvo casi dos meses sin jugar.

A punto de cumplir 26 años, el portugués ha pasado más de una cuarta parte de su vida en España, ya que el Valencia abonó dos millones de euros a Vitoria Setubal en enero de 2014 cuando Vezo apenas tenía 19 años.