El Castellón vive este sábado una nueva final ante Las Palmas... en 1984 ya le ganó una

CASTELLÓ. El CD Castellón se juega este sábado gran parte de su futuro en la Segunda División ante un rival histórico, la UD Las Palmas. En los casi 99 años de historia del club albinegro, son muchos los enfrentamientos entre ambos equipos y lo cierto es que la UD Las Palmas siempre fue un rival que se le dio bien al conjunto orellut. 

Pero si hay que acogerse a un partido en concreto, éste bien podría ser el que supuso el triunfo de los castellonenses en la extinta Copa de la Liga en la temporada 83-84. Una final disputada a doble partido y que comenzó en el estadio Castalia, donde los locales se impusieron por 3-1 (Javi Valls, Pedro López y Alcañiz) el 26 de junio de 1984. El partido de vuelta se jugó en el estadio Insular el 30 de junio de 1984 y concluyó con empate a 1 (Lafita). Aquel título, que por cierto no conserva el club en sus vitrinas, lo levantó como capitán Javier Ibeas.

Las estadísticas dicen que el conjunto canario ha sido, históricamente, un rival propicio para los de Castalia. De hecho, de los enfrentamientos repartidos entre partidos de Liga, en Primera División (una victoria y dos empates para el Castellón), Segunda (cinco victorias locales y cinco empates), Copa de la Liga (la final que ganó el Castellón) y dos enfrentamientos en Castalia en Copa del Rey, la UD Las Palmas solo venció en una ocasión, la última: la temporada pasada en Copa del Rey (0-2).

Ahora, ante una de las últimas balas para afrontar la recta final del campeonato con opciones de salvación, Castellón Plaza analiza con algunos de los protagonistas del título ante los canarios cómo se debe afrontar el partido. Y hay dos elementos comunes: el optimismo... y el carácter.

La Copa de la Liga, el trofeo perdido

El Castellón de la temporada 83/84 estaba plagado de canteranos de la factoría Bovalar: Carrillo, Manchado, Ibeas, Viña, Javi, Alcañiz, Pedro López, Fermín, Breva o Javier Beltrán formaban la base del once. Este último recuerda que conformaban "un equipo muy joven, y fue una gran experiencia jugar aquella final, por suerte ganamos y yo aún conservo la medalla que nos dieron, pero el trofeo se ha perdido".

El fino centrocampista señala que "nunca se le ha dado importancia a aquel título, pero ahí está y con gente de casa. Ahora ha cambiado, ya prácticamente no hay presencia de la cantera; es una lástima". Beltrán espera de cara al choque de este sábado "que se rompa la racha y por fin tengan un poco de suerte. Ahora la Segunda es más difícil y se ha puesto muy complicada para el Castellón, pero siempre confías en que puedan remontar".

Otro histórico albinegro integrante de aquella plantilla es Pedro Alcañiz, que en esa temporada "acababa de llegar del juvenil y entonces ni era titular ni siquiera lo soñaba. Así que imagínate la ilusión de ganar un título y encima marcar uno de los goles en el partido de Castalia. Hice el tercero, fue un subidón".

El punta castellonense cree que se ha dado poco valor a aquel triunfo "porque luego la competición no tuvo continuidad y desapareció. No sabía que el trofeo no está en el club".

La base, fundamental

Todos coinciden en la importancia de la cantera en los mejores momentos deportivos del club: "La inmensa mayoría o éramos de la cantera o de por aquí y eso al Castellón siempre le ha ido bien".

Respecto de la situación actual, Alcañiz manifiesta que "no es que sea necesario ganar a Las Palmas, sino encadenar una racha de victorias que te saque de ahí. Es complicado y creo que donde había que reforzar el equipo no se ha hecho que es en la delantera".

Carácter para salir de una situación difícil

El capitán en aquel partido de hace 36 años era otra institución. Javier Ibeas lo recuerda bien: "Siempre me elegían los compañeros, quizá por mi carácter en el campo". El lateral, quien aparece en la instantánea recogiendo el trofeo desaparecido de las vitrinas -"intuyo que se perdió cuando se trasladaron las oficinas de la calle Trinidad a los bajos de Castalia", apunta- rememora aquella Copa de la Liga "con alegría, ya que es de los pocos trofeos que ha ganado el Castellón".

"Siempre se nos daban bien, por su estilo, tanto Las Palmas como el Tenerife", señala cruzando los dedos el ex capitán albinegro, quien apela al carácter para sacar adelante la difícil situación por la que atraviesa el equipo: "Hace falta mucho carácter para afrontar este tipo de situaciones. Los jugadores saben que ha costado mucho ascender y tienen esa responsabilidad. El último mes y medio ha sido complicado, pero tienen que intentarlo".

Palabras de tres campeones albinegros que viven pendientes del Castellón y que saben de la trascendencia de la final que juega el conjunto orellut... de nuevo ante Las Palmas.