CASTELLÓ. El director deportivo del Castellón, Fernando Gómez Colomer, inicia su nueva etapa en la entidad albinegra con la misión de confeccionar una plantilla nueva para afrontar con garantías su reto en la Primera RFEF. Lo tiene que hacer con la mayor brevedad, ya que la pretemporada arrancará dentro de tres semanas aproximadamente y para entonces tiene que haberse cerrado una base del equipo que competirá en la tercera categoría del fútbol español.
Uno de los temas prioritarios antes de fichar es aclarar la situación de los futbolistas con contrato en vigor. Hay 11 jugadores que finalizan su relación con el club más allá del 30 de junio de este año, pero ahora mismo se desconoce cuántos de ellos cumplirán su compromiso. Previsiblemente serán pocos, toda vez que el club ya ha mostrado su intención de hacer un lavado profundo tras el fiasco deportivo de esta campaña. Además, algunos de estos futbolistas verían con buenos ojos una salida ante la esperanza de encontrar sitio en Segunda División. Gómez Colomer tiene previsto comunicarse con ellos entre este fin de semana y la próxima para hablarles de sus intenciones.
Son los casos de Óscar Whalley y Paolo Fernandes, jugadores que no entran en los planes de Sergi Escobar y que confían en seguir sus carreras en el fútbol profesional.
El guardameta ha sido titular en casi toda la segunda vuelta, con momentos de gran lucidez que se tradujeron en puntos importantes para el Castellón. Pero su nivel fue decreciendo según se acercaba la resolución del campeonato y Escobar acabó el curso dejándolo en la grada, en un claro indicativo de que no cuenta con él para el nuevo curso. Además, el aragonés se agarra a los buenos momentos que vivió a las órdenes de Garrido para buscar otro destino en la Liga Smartbank.
Paolo Fernandes no ha jugado prácticamente nada, pero también quiere seguir su carrera en el fútbol profesional. Pese a que no ha contado para nada en los planes de los tres técnicos que han dirigido al equipo, considera que tiene cartel para atraer el interés de clubes de LaLiga o extranjeros.
Quien sí tiene cartel de verdad es Rubén Díez, otro de los jugadores con contrato en vigor que posiblemente no siga en el Castellón. Escobar ya lo da por perdido desde hace varias semanas.
Queda pendiente también la situación de los jugadores que acabaron cedidos la pasada temporada (Guillem Jaime, Jesús Carrillo y Alejandro Marcos). En principio harán la pretemporada a las órdenes de Escobar, al igual que Campos, Carles Salvador, Juanto y César Díaz. Quien no estará operativo es Jorge Fernández, lesionado de larga duración y cuyo regreso podría producirse en enero.