Hacer un Reus o un Alcoyano

ALICANTE. "Hacer un Reus", pero no del tipo que ha hecho el conjunto rojinegro este curso, emular al Reus de la 2015/16 o al Alcoyano de la 2008/09.

El Hércules ya tiene la clasificación matemática para el 'play-off' a falta de dos jornadas para la finalización de la Liga regular. Disputará, por tanto, su séptima fase de ascenso a Segunda A y su tercer 'play-off', justo tres años después de haberlo hecho por última vez. Fue en 2016, cuando se clasificó como tercero para el mismo y tras eliminar a Tudelano y Toledo cayó en la ronda definitiva a manos de un Cádiz que había sido cuarto en el grupo IV. 

Ese curso 2015/16, el equipo que entonces entrenaba Vicente Mir, logró el pase matemático para el 'play-off' en la jornada 37, pero manteniendo opciones hasta la última de ser desde primero a cuarto. A día de hoy, el Hércules ya sabe que en el peor de los casos será tercero, que si es capaz de sumar cuatro puntos más se asegurará la segunda plaza y que si gana al Barça B el domingo podría incluso aspirar en la jornada 38 al campeonato ya que recibe al líder, el Baleares. Para lo anterior, además de vencer el conjunto de Lluís Planagumà en el Mini, sería necesario que los palmesanos no ganen al Lleida: si el Baleares empata ese partido, el Hércules le tendría que ganar en la última jornada por más de dos goles, pero si pierde con los ilerdenses a los blanquiazules les bastaría con una victoria por la mínima. 

El Lleida, con alguna opción pese al batacazo

Pese al batacazo que se pegó el domingo ante el filial del Barça, el Lleida todavía tiene alguna opción de jugar el 'play-off' si gana en Palma (en la última jornada "se enfrenta" al Ontinyent, por lo que sumará los tres puntos de rigor sin jugar). 

Eso sí, los números avalan con creces al Baleares: como local, equipo de Manix Mandiola, solo ha empatado dos partidos (con Castellón y Ebro) y perdido uno (ante el Sabadell en la cuarta jornada) en lo que llevamos de curso. Además, el Hércules no ha vencido este curso ningún partido por más de dos goles de diferencia. 

El Reus se puso primero en la jornada 38 de la 2013/14

Si se alineasen los astros por partida doble y en la última jornada los blanquiazules asaltasen la primera plaza, sería su primer campeonato de grupo y, por ende, la primera vez que llegan a una fase de ascenso a Segunda A como primeros. Además, reeditarían el 'sorpasso' que precisamente en la 2015/16 dio el Reus en la jornada 38 cuando le arrebató al Villarreal B la primera plaza. 

Ese es el cambio de líder sobre la bocina más reciente en el grupo III: los amarillos arrancaron la jornada 38 como primeros con 70 puntos, los mismos con los que lo hicieron los rojinegros que fueron capaces de ganar en Cornellà y aprovechar que el filial del Villarreal no pasaba del empate muy cerca de allí, en Barcelona con el Espanyol B. Ese punto logrado por el Villarreal, a su vez, impidió al Hércules superarle en la tabla: los blanquiazules vencieron en Lloseta en el último partido, pero el empate a 71 puntos en la tabla con el filial amarillo se resolvió a favor de este que le tenía ganado el golaveraje particular.

En la eliminatoria de campeones el Reus se cruzó con un Racing de Santander al que superó, ascendiendo los reusenses por primera vez a Segunda A.

El Alcoyano, el mejor ejemplo

Pero hay un 'sorpasso' en el grupo III anterior, concretamente en 2009, que se asemeja más al que podría protagonizar el Hércules. En la jornada 32 el Alcoyano se puso líder en el último partido de Liga regular al empatar en Sabadell y beneficiarse de la derrota del Villarreal B en Sant Andreu. El equipo alicantino, que entrenaba entonces José Bordalás, fue capaz de levantarle una desventaja de tres puntos en las dos últimas jornadas al filial amarillo (perdió los dos últimos encuentros, mientras que los alicantinos sumaron cuatro puntos).

Eso sí, esa fue la primera temporada en la que funcionó el actual sistema de 'play-off' y el Alcoyano el primer campeón que se quedó sin ascenso: primero quedó eliminado en la ronda de campeones por el Cartagena (merced a un gol en el descuento del choque de vuelta, en El Collao) y en la segunda eliminatoria por el Alcorcón. Curiosamente, el Villarreal B, todo y haber perdido el liderato en el último suspiro, fue el equipo que ascendió junto a Cartagena, Cádiz y Real Unión que habían sido primeros en sus respectivos grupos.

Una clasificación del grupo III muy apretada

A diferencia del resto de grupos, en el III la parte alta (también la baja) de la clasificación está muy apretada a falta de dos jornadas para la finalización de la Liga regular. 

Casi tanto como en la 2013/14 cuando en la jornada 38 no solo se decidió el liderato, también qué cuatro equipos jugaban el 'play-off' y en qué orden se clasificaban para el mismo: el Llosetense llegó al último partido como primero, ganándolo y reteniendo esa posición; también lo hicieron Hospitalet y Lleida que se mantuvieron segundo y tercero, mientras que el Elche Ilicitano, el derrotado precisamente por el Llosetense, cedía la cuarta plaza al Nàstic que también ganó en esa intensa última jornada. 

Un año antes, por ejemplo, también se había vivido una última jornada de infarto (la 42 y es que ese curso hubo 21 equipos en el grupo III), a la que L'Hospitalet llegó y salió como primero pese a no pasar del empate y ver como el hoy desaparecido Huracán le igualaba a 80 puntos en la tabla, pero quedaba por detrás por la diferencia de goles. 

El Hércules nunca ha sido campeón de grupo

Como recuerda la agencia EFE, a pesar de haber competido 15 temporadas en Segunda B y de haber participado en seis fases de ascenso, los blanquiazules nunca han sido campeones de grupo.

Si en 2016 necesitaban una carambola en la jornada 38 para acabar primeros, en la 1990/91 directamente perdieron el liderato en el último partido pese a depender de sí mismos, quedándose incluso fuera de la promoción. La derrota en el Rico Pérez ante el Cartagena (0-3) y las victorias de los rivales directos les hicieron caer a la quinta plaza (a un punto de los tres primeros, Barça B, Cartagena y Manlleu, y empatado con el Alcoyano que quedaba por delante por el golaveraje).

Hasta la fecha el Hércules ha demostrado que solo sabe ascender sufriendo: el máximo ejemplo de lo anterior es la temporada 1992/93 cuando llegó a la entonces liguilla de ascenso como cuarto, quedando encuadrado en un grupo con Las Palmas, Salamanca y Gimnástica de Torrelavega y quedando primero del mismo y ascendiendo contra todo pronóstico.