Murthy: "Voy a subir el precio de los abonos si la covid nos deja abrir el estadio" 

VALÈNCIA. No parecen llegar las mejores noticias para la futura campaña de abonos del Valencia CF. Si generalmente estas campañas son un reclamo para generar ilusión en el aficionado, el presidente del club de Mestalla, Anil Murthy, se ha encargado de destrozar cualquier atisbo de intención de acercar al valencianista a su equipo con unas explosivas declaraciones en las que asegura que va "a subir" el precio de los pases de temporada "si la covid permite abrir el estadio".

En el transcurso de una conferencia telemática del Campus France Singapore, Anil Murthy explicó que su experiencia le dice que hay que subir el precio de las entradas y que bajarlos tras una mala campaña es una política errónea: "Estoy obsesionado con la toma de decisiones movida por los datos. No me digas que estás haciendo algo sin datos que lo respalden, que apoyen esa toma de decisiones. El precio de los abonos, por ejemplo. Decidir los precios para los abonos de temporada y las entradas para partidos sueltos es una disyuntiva que tenemos cada año. En el pasado, antes de que yo tomase el mando, la teoría era que no te iba bien y acababas el duodécimo, había que cobrar menos. Para que más aficionados viniesen. De hecho, incluso mejor: ¡regala la entrada! Abre el estadio gratis y habrá más seguidores. Yo pedí que me enseñasen los datos, porque esta parecía una decisión emocional sin ningún tipo de base. Mi respuesta fue: "No os creo. Creo que las entradas gratis hacen el acontecimiento menos valioso y acabará viniendo menos gente". 

Acto seguido comentó que en los años anteriores la gente agotó los abonos pese al incremento de precios, así que este año pensaba subir también los precios de los pases de temporada: "Incrementé los precios de las entradas, un 20%, y las agotamos. Al año siguiente nos fue bien y las incrementamos otro 20%. Y volvimos a agotar entradas. Este año no lo hemos hecho tan bien, pero voy a subir los precios de nuevo si la covid nos deja abrir el estadio. La política de precios debe estar orientada por los datos y hay un sweet-spot (precio justo) que puedes explicar y justificar. Básicamente, aquel que pague estará llegando a este precio justo. Pero no a base de emociones."

El discurso del dirigente no contribuye a generar un terreno abonado para crear un clima favorable a la renovación de pases con vistas a la temporada 21/22.

Teniendo en cuenta que el club parte de una base de 40.000 abonados de manera automática tras la medida aprobada en mayo del año anterior, las previsiones hablan de un significativo descenso en el número de abonados para la temporada próxima.

La deriva deportiva y social del club en las dos últimas campañas ofrecen un panorama totalmente diferente al contexto en el cual se llegó a los 40.000 abonados. Entonces se venía de ganar una Copa del Rey y entrar dos años de manera consecutiva en la Champions (datos estos que no tiene en cuenta Murthy cuando habla de su exitosa política de incremento en el precio de los abonos en los últimos años). 

Dos temporadas después, aquel proyecto se ha desmantelado, las clasificaciones ligueras dejan bastante que desear y la brecha entre los mandatarios del club y la afición es altamente significativa como demuestran las últimas declaraciones del presidente. 

Ya el verano pasado el club vio como un 20% de sus socios (unos 8.000 abonados aproximadamente) pidieron la devolución integra de la parte proporcional del abono por los partidos que se disputaron a puerta cerrada.

Ese 20% es un porcentaje de descontento con el que ya se cuenta para la no renovación de abonos. Determinados comportamientos sociales en el día a día tampoco ayudan mucho. Que el club siga teniendo silenciados los comentarios en redes sociales, sin ser un hecho definitivo, no fomenta la predisposición a sacarse el abono por más que el club esté enviando mails a sus socios invitándoles a desayunos (máximo de 10 personas) en los que se pretende recabar información del aficionado "para mejorar su experiencia en Mestalla".

El hecho de que Mestalla pudiera abrir las puertas a 5.000 personas en la penúltima jornada de campeonato y que -a duras penas- no se pasara de las 2.500 entradas vendidas hace que las previsiones internas no sean nada halagüeñas. Todo apunta a que pasar de los 30.000 abonados se consideraría como un éxito en las circunstancias actuales.