ALICANTE. El fin de las obras de reurbanización del paseo de La Explanada en el conjunto de sus tres tramos, que ha permitido habilitar una nueva plaza de cerca de 1.500 metros cuadrados en su confluencia con La Rambla desde este mes de marzo, lleva al departamento de Ocupación de Vía Pública del Ayuntamiento de Alicante a mover ficha para fijar nuevas condiciones de emplazamiento de las terrazas de la hostelería. Y, al tiempo, reajustar su distribución en el conjunto del paseo, con una actualización de la Plan de Ordenación de Veladores del que se considera como principal paseo turístico de la ciudad, en el que en la actualidad existen 14 locales con velador y otros tres que carecen de él, pero que cumplirían las condiciones para poder solicitarlo en el futuro.
Por lo pronto, lo cierto es que la nueva propuesta trata de primar el espacio de uso peatonal sobre su posible utilización con fines económicos privados. Al menos, en lo que respecta en esa nueva plaza generada entre las intersecciones de la calle Bilbao y la avenida de La Rambla, hasta el punto de que se prohíbe la posibilidad de instalar mesas y sillas en toda su superficie. Así se hace constar en la propuesta elaborada por el departamento que coordina la edil Cristina Cutanda, que será analizado en la reunión de la Junta de Distrito número 1 este miércoles, después de que se hayan mantenido reuniones informativas previas tanto con representantes vecinales como con empresarios hosteleros, según se detalla en la propia propuesta.
En concreto, la revisión de ese Plan de Ordenación de Veladores detalla que, en desarrollo de una decisión de carácter político, no se contempla la opción de conceder autorizaciones para la disposición de terrazas en el conjunto de ese nuevo espacio de intersección con La Rambla, con el fin de favorecer su disfrute por parte de la ciudadanía y de facilitar una mejor contemplación de los elementos ornamentales incorporados con motivo de los trabajos de reurbanización de esa tercera fase del paseo de La Explanada. Entre ellos, al margen del nuevo mobiliario urbano y el dibujo de las ondas generado por el propio pavimento, figura como elemento singular la instalación de varios surtidores de agua provistos de iluminación especial.
Con ello, esa nueva plaza queda liberada para que pueda utilizarse como escenario de conciertos, representaciones o exposiciones que pueda organizar el propio ayuntamiento, sin necesidad de ordenar la retirada del mobiliario de los negocios de hostelería situados en su entorno. Y, al tiempo, se elimina un posible factor que hubiese podido desencadenar molestias por ruido para los residentes de la zona, en sintonía con la filosofía que, según el equipo de gobierno, del Partido Popular (PP), habría imperado en la nueva versión de la Ordenanza de Ocupación de Vía Pública, aprobada de forma provisional en el pleno de julio, el pasado jueves, en la que se promueve una reducción en los horarios de funcionamiento de los veladores tanto en invierno como en verano.