Carlos Alcaraz se queda a 440 puntos de Nadal y puede asaltar el número 1 en el US Open

MURCIA. Carlos Alcaraz Garfia, merced a sus dos victorias en el Masters 1.000 de Cincinnati, que por cierto ganó un sorprendente Borna Coric y en el que él llegó a cuartos de final, sigue siendo el cuarto jugador del mundo y se ha quedado a tan sólo 440 puntos de Rafa Nadal, eliminado a las primeras de cambio en ese torneo. El joven tenista murciano, de 19 años, podría asaltar el primer puesto del ranking en el Abierto de Estados Unidos, que arrancará a finales de este mes de agosto.

El de El Palmar, que cayó en cuartos frente al estadounidense Cameron Norrie por 6-7 (4), 7-6 (4) y 4-6 después de haberse impuesto al estadounidense Mackenzie McDonald (6-2 y 6-2) y al croata Marin Cilic (7-6 (4) y 6-1), sumó 145 puntos en Cincinnati pasando a tener 5.190 por los 5.630 que acumula Nadal, tercero en la clasificación.

La segunda posición es para un Alexander Zverev que sigue sin competir por lesión -el alemán tiene 5.760 puntos- y la primera para el ruso Daniil Medvedev, que cuenta con 6.885 pero en Nueva York defenderá los 2.000 que obtuvo el pasado año con el título que consiguió, por lo que de no repetir presencia en la final podría ver amenazada su posición de privilegio, a la que optan Nadal, Alcaraz y algún otro jugador en función de los resultados de este final de temporada.

Stefanos Tsistipas, subcampeón en Cincinnati al perder por 7-6 (0) y 6-2 ante el croata Coric, es quinto con 4.890 puntos; y por detrás aparecen el serbio Novak Djokovic, sexto con 4.470; el noruego Casper Ruud, séptimo con 4.695; el canadiense Felix Auger Aliassime, octavo con 3.625; Norrie, noveno con 3.415; y el polaco Hubert Hurkacz, décimo con 3.355.

El asturiano Pablo Carreño, decimocuarto con 2.375 puntos; y el castellonense Roberto Bautista, decimoctavo con 1.840, son los siguientes españoles en un ranking en el que Coric ha escalado nada menos que 123 puestos hasta el vigésimo noveno que ahora ocupa con 1.360 puntos, mil de ellos sumados en su extraordinaria semana en Cincinnati.