VALÈNCIA. El Valencia comenzó ayer su trabajo en la ciudad deportiva con pruebas médicas y hoy será su primer entrenamiento en doble sesión con muchas cosas que resolver en cuanto a la plantilla de la que va a disponer el entrenador italiano el día 12 de agosto cuando dispute la primera jornada liguera.
Como en los últimos tres años, el club está teniendo muchos problemas a la hora de poder confeccionar un equipo que pueda competir por los puestos altos de la clasificación. Intentando desgranar por posiciones, debemos tener en cuenta la importancia de poder dar salida a algunos jugadores para poder firmar futbolistas de cara a la temporada recién iniciada.
Empezando por la portería, el Valencia tiene actualmente cuatro guardametas: Mamardashvili, Cillessen, Jaume y Cristián Rivero que vuelve tras su cesión en Alcorcón. La idea del club es dar salida al internacional holandés al que le queda un año de contrato y una amortización de nueve millones de euros y esa es precisamente la cantidad que quiere ingresar el club. Por tanto, será difícil que algún club pague esa cantidad y mientras no se resuelva ese tema, la portería del Valencia CF no quedará definida. El portero georgiano tiene plaza segura y dependiendo de lo que pase con el meta holandés, el club decidirá que hacer con Rivero (creo que se buscará una nueva cesión) y con Jaume que le queda un año de contrato.
En defensa, en el lateral derecho el Valencia tiene la posición muy bien cubierta con dos jugadores de máximas garantías: Dimitri Foulquier y Thierry Rendall. Con más de un año de contrato y muchos minutos disputados la temporada pasada, salvo oferta importante los dos serán los encargados de cubrir esa posición en el presente curso. El lateral izquierdo también está bien cubierto con tres jugadores: el capitán Gayà, Toni Lato y Jesús Vázquez. El club tiene dos alternativas con el capitán: renovarlo o venderle este verano para poder ingresar y paliar las pérdidas económicas de esta temporada. Si saliese Gayà, el Valencia tendría la opción de renovar a Lato, que acaba en 2023 y contar con Jesús y Lato para el puesto de lateral izquierdo. En el eje de la zaga el club cuenta con otro de los capitanes como Gabriel Paulista, el suizo Eray Cömert y Diakhaby además de los canteranos Mosquera, Iranzo y el uruguayo Facu González. El internacional guineano ha pedido salir al acabar en 2023 y quiere buscar nuevas experiencias en la Premier o Bundesliga. Sin embargo, a día de hoy el club no ha recibido ninguna oferta y el jugador tampoco ha traído propuestas. El club vería bien desprenderse del jugador por una cantidad que rondara los 10 millones y después ver la capacidad y el rendimiento que pueden dar los canteranos. Si saliese Diakhaby, Gattuso solo contaría con Paulista y Cömert (su rendimiento no ha sido el esperado) y los tres canteranos. En mi humilde opinión veo carencias en esa posición a no ser que alguno de los canteranos sorprendiera con su rendimiento en esta pretemporada.
En la medular el Valencia cuenta con cuatro futbolistas. Otro de los capitanes Carlos Soler, Hugo Guillamón, Uros Racic y Koba Leïn. De estos cuatro, Soler es el que más posibilidades y ofertas tiene para abandonar el club, Guillamón que debe resolver su futuro con una renovación y Racic y Koba. Si saliera el capitán el club debería reforzar esa posición con la llegada de un fichaje de garantías.
En las bandas es donde el Valencia tiene más problemas. Después de que Cheryshev acabase contrato e Ilaix, Bryan y Hélder Costa finalizasen sus cesiones, el Valencia solo cuenta con Yunus Musah. El estadounidense sin ser un extremo específico puede jugar ahí. Los canteranos sí que son específicos como Fran Pérez y Hugo González además de Yellu y Pablo Gosálbez que pueden jugar por dentro y por fuera. Y por supuesto, Gonçalo Guedes que será una de las piezas importantes del misterio en ese hipotético sistema de 1-4-2-3-1 o 1-4-3-3. Ahora bien, el luso es otro de los jugadores que están en la rampa de salida y por el que el club espera ingresar unos 40 millones de euros. Si sale el portugués, el club tendrá que hacer mínimo dos incorporaciones en los costados.
Como '9' o jugador referencia en ataque, el Valencia dispone de tres jugadores fijos: Maxi Gómez, Hugo Duro y Marcos André más Manu Vallejo que vuelve tras su cesión en el Alavés. En esta posición parecía que el charrúa es el que partía con más opciones de salir, pero eso ha cambiado en los últimos días y parece ser que tras una charla con Gattuso, Maxi quiere ser importante este curso después de dos malos años con cuatro y cinco goles en su casillero. Busca reivindicarse y volver a ser importante con el Valencia para llegar con opciones a la cita mundialista ya que el seleccionador Diego Alonso le ha hecho saber que contará con él siempre y cuando juegue asiduamente con su club.
Una vez desgranada la plantilla que dispone Gattuso tengo que decir que si se producen las salidas previstas de Cillessen, Soler, Guedes, Gayà, Diakhaby, Rivero y Vallejo y las posibles ofertas por Maxi o Yunus, el Valencia deberá realizar al menos dos incorporaciones en la línea defensiva: un portero y un central. En la medular, un mediocentro y dos jugadores de banda. En ataque, un delantero y sobre todo que alguno de los canteranos sorprenda y se quede a las órdenes del técnico italiano.
El mercado va más despacio de lo previsto para todos y será largo. Por tanto, Gattuso va a tener que trabajar en el inicio con jugadores que probablemente no sabe si empezarán LaLiga a sus órdenes. Bajo mi putno de vista, no es el escenario ideal. Creo sinceramente que es muy importante para un entrenador que llega nuevo a un club poder trabajar desde el inicio de pretemporada con el 80% de lo que va a ser tu plantilla durante el curso para crear automatismos, un modelo de juego además de trabajar uno o varios sistemas, la idea de juego va a cambiar con respecto a lo que ha sido el Valencia las últimas temporadas pasando de ser un equipo contragolpeador a ser un equipo que quiera salir desde atrás con balón controlado. No obstante, no sé si será así y el italiano tendrá que adaptarse y esperar a las salidas para a partir de ese momento poder realizar las incorporaciones pertinentes.