VALÈNCIA. Ha llegado el momento esperado por Peter Lim desde que compró el Valencia CF. El Valencia volverá a disputar los octavos de final de la Champions League siete temporadas después. El multimillonario asiático se hizo con el paquete accionarial con el objetivo de disfrutar de las noches Champions. Su afán por la máxima competición ha quedado claro con sus permanentes visitas para ver al París Saint-Germain o acudir a Old Trafford.
La Champions siempre ha sido un objetivo prioritario para el Valencia no solo a nivel deportivo, también en lo económico puesto que supone la vía más rápida para ir ganando salud financiera temporada tras temporada. En el caso de Meriton, tres de sus cinco proyectos en la ciudad del Turia han acabado con la posibilidad de jugar la Champions y los otros dos peleando por lograr la permanencia. Durante su dos anteriores participaciones en Champions, Peter Lim nunca ha podido disfrutar de ver al Valencia entre los dieciséis mejores equipos de Europa. No lo consiguió Nuno y tampoco Marcelino. Ambos acabaron en tercer lugar y cayeron a la ronda de eliminatorias de la Europa League.
Ahora, Peter Lim va a tener la oportunidad de ver como su club se codea con los grandes del continente. De hecho, fue una de las voces más autorizadas del vestuario, José Luis Gayà, el que reconoció el pasado 10 de diciembre tras asaltar el Amsterdam Arena que Peter Lim estaría "contento" por acceder a la fase final. Cabe recordar la polémica que se generó la temporada pasada en torno a la preferencia de Meriton por la Copa del Rey, tras la acusación arrojada por Marcelino sobre el interés de la propiedad en conquistar el torneo.
El Valencia está ante una oportunidad única de volver al sitio que le corresponde. Un escenario que se han ganado los jugadores, pasando el grupo más duro de la Champions y venciendo en campos tan complicados como Stamford Brigde y Amsterdam Arena. Ahora, el escenario no va a ser inferior ni mucho menos. San Siro es uno de los templos del fútbol, uno de los estadios donde ganar saca a relucir el orgullo del vencedor. Enfrente estará el Atalanta, que llega en un buen momento tras imponer respeto en la lucha por la cuarta plaza en la Serie A.
En lo que concierne al Valencia CF, atraviesa un momento en el que debe dar un golpe sobre la mesa o sucumbir. Su imagen como local es intachable esta temporada. El encuentro ante el Atlético de Madrid es el fiel reflejo de que no hay que perder la fe sobre las prestaciones del cuadro de Celades. Además, la jornada no ha sido terrorífica y la Champions sigue estando a dos puntos y la tercera plaza a cuatro. No obstante, queda la mitad del trabajo por hacer. El rendimiento fuera de casa y sin la pareja de centrales titular genera un recelo que hay que subsanar para tener opciones de acceder a los cuartos de final de la Champions League.