El puzzle de la defensa tras los fichajes de Paulista y Murillo

VALENCIA. Uno de los principales objetivos de Marcelino García Toral en su llegada al Valencia CF era el de mejorar las prestaciones defensivas del equipo y eso, en la idea del técnico, pasaba por un cambio de piezas que se está produciendo en el eje de la zaga y que ha sufrido un acelerón en los últimos días tras la llegada de Murillo y Gabriel Paulista.

La llegada de ambos defensas, por su parte, ha dejado un ‘overbooking’ en la línea defensiva que ahora cuenta con seis integrantes para dos puestos, con lo que mínimo deben abandonar el club dos centrales para acabar el período de fichajes con cuatro centrales lo preferido por Marcelino a la espera de tomar una decisión definitiva con Javi Jiménez.

El número uno para abandonar la defensa es Aymen Abdennour, tanto por un tema deportivo como económico. El tunecino no convence para nada a Marcelino, como así dejó claro en la primera jornada cuando se quedó fuera de la lista, y además es uno de los futbolistas con un alto coste para la entidad de Mestalla, con lo que deberá abandonar la entidad antes del próximo uno de septiembre.

El Valencia CF ha transmitido en varias ocasiones que no tiene intención de ‘regalar’ al central africano pero pasan los días y las ofertas que se esperan en las oficinas valencianistas no terminan de llegar y los intereses que llegan no convencen al jugador que acaba rechazando a los equipos que sondean su incorporación.

Pero la pieza clave de puzzle es Ezequiel Garay. Del futuro del argentino depende, en gran parte, que haya más cambios en la defensa. Marcelino cuenta con el argentino, como demostró ante Las Palmas cuando fue titular pese a no haber participado en el grupo durante el último mes de pretemporada, pero también es cierto que el argentino sigue sin definir su futuro.

El interés del Spartak de Moscú parece haberse difuminado tras rechazar el Valencia CF la primera oferta de los rusos y ahora es la Juventus quien nuevamente ha mostrado su intención de hacerse con el central, pero para eso deberá hacer una oferta que supere los veinte millones de euros, una cantidad en la que el club de Mestalla recupere lo invertido hace ahora un año.

De marcharse Garay, Marcelino tiene claro que quiere un recambio para el argentino, con lo que el Valencia CF acudirá al mercado en busca de un zaguero que complemente a Paulista y Murillo, pero si finalmente termina quedándose el asturiano considera que tiene una defensa de plenas garantías.

El cuarto en discordia, ya sea con Garay o con el que llegue para sustituirle, es Rubén Vezo. El portugués, titular en el estreno liguero, tampoco tiene claro su futuro en Mestalla. Marcelino está contento con la actitud y el trabajo del luso y no le importa si sigue en la plantilla, pero tampoco se opondría a una marcha si llega una oferta y no exigiría un recambio como si haría con Garay.

En el caso de que se busque una salida, es el club el que debe tomar una decisión con el futuro del portugués. Vezo termina contrato con el Valencia CF en junio de 2018 con lo que el club debe decidir si renueva al jugador para volver a cederlo y que tenga los minutos que, en principio, no tendrá en Valencia, o si por el contrario decide desprenderse de él de una manera definitiva.

La situación de Javi Jiménez, por último, es la misma que se pensaba desde el inicio de la temporada y no es otra que el futbolista se quede con dinámica total de primer equipo, entrenando a las órdenes de Marcelino, pero que juegue con el filial los fines de semana, salvo que sea necesaria su presencia en el primer equipo.

El Valencia CF quiere hacer una amplia reconstrucción de su defensa en la que podrían cambiar los cuatro centrales del pasado año. Dos ya están fuera, como son Mangala y Santos, mientras que Abdennour lo estará antes del fin de mercado y Garay sigue pensando si marcharse o quedarse a las órdenes de Marcelino.

Las piezas en el puzzle están claras para el técnico, Paulista y Murillo son sus peticiones y cuenta con Garay, pero si se va tendrá que llegar un recambio. El futuro de Vezo dependerá de su voluntad y las ofertas que lleguen, mientras que Jiménez alternara primer equipo y filial.