VALÈNCIA. El Valencia CF puso fin en el ayuntamiento de la ciudad a la segunda jornada de celebración por la consecución de su octavo título de Copa ante cerca de 10.000 seguidores que se dieron cita.
Al coincidir ayer domingo con la jornada electoral, el Valencia CF tuvo que retrasar a hoy las clásicas visitas a la Generalitat y el Ayuntamiento, si bien el domingo ya celebró con su afición el título con el recorrido en autobús por las principales calles de la ciudad y con un fin de fiesta en un Mestalla abarrotado.
Tras la visita a la Basílica y posteriormente a la Generalitat, la comitiva valencianista llegó al edificio consistorial donde les recibió el alcalde Joan Ribó y el resto de representantes de los distintos grupos políticos municipales, así como la corte de la Fallera Mayor.
Ribó quiso agradecer a la plantilla y cuerpo técnico "el trabajo y esfuerzo que habéis hecho sin el cual tantos miles de valencianistas no hubieran disfrutado de tanta felicidad como lo han hecho en las últimas 48 horas".
El alcalde bromeó con los jugadores a los que les pidió que no consigan los éxitos "con tanta intriga porque no nos quedaban nervios ni para la jornada electoral de ayer" y añadió que "seguro que este Salón de Cristal del ayuntamiento os verá pasar de nuevo por aquí muchas veces más".
Por su parte, el presidente del Valencia CF, Anil Murthy, indicó que "estamos viviendo unos días inolvidables. Es increíble ver a tanta gente feliz. Hemos sufrido todos muchos y ahora nos merecemos disfrutar de estos éxitos".
Una vez acabados los parlamentos, los jugadores se dirigieron al balcón del ayuntamiento donde les esperaban miles de seguidores que estallaron de júbilo al ver aparecer a sus jugadores y el trofeo de la Copa del Rey.
El capitán Dani Parejo quiso agradecer a los hinchas valencianistas su apoyo y presencia, y aseguró que "estamos viviendo unos días inolvidables. Después de año que llevábamos, merecíamos un final así en el año del centenario. Muchas gracias y nos vemos el año que viene".
Los aficionados entonaron el "Rodrigo quedate" ante los rumores del interés de varios clubes en su fichaje y el internacional español cogió el micrófono para señalar que "ha sido una temporada maravillosa e inolvidable. Poder vivir esto es eterno".
"Llevo cinco años aquí y he vivido momentos no tan buenos por lo que acabar así en la temporada del centenario es un orgullo", concluyó.
Mientras sonaba el himno del club y el regional, los jugadores no paraban de grabar con sus teléfonos móviles a una afición entregada que coreó el nombre de sus jugadores e incluso bromeó con Marcelino cantándole: "Saca a Kang In Lee", en referencia al joven jugador surcoreano al que el técnico no le dio demasiados minutos.
El preparador asturiano agradeció que "desde el primer día que llegué a Valencia me habéis tratado muy bien para ser entrenador. Es extraordinario para nosotros estar aquí" y recordó que "es muy difícil ganar la Copa y mas ante un rival como el Barça, todo un equipazo".
Marcelino quiso recordar y pidió el reconocimientos para los futbolistas con menos participación en esta temporada, así como para el resto de la plantilla, a la que pidió que brindaran un gran aplauso como despedida del acto.