Hoy es 10 de octubre
ALICANTE. La jaimitada de Cristian Cedrés ante el Valencia Mestalla le puede salir todavía más cara. El Hércules tiene decidida la incoación de un expediente disciplinario al extremo, después de que el Juez Disciplinario Único de la Segunda Federación le sancionara con cuatro partidos de suspensión por, entre otras lindezas, llamar "payaso" y encararse con el árbitro del encuentro ante el filial valencianista Juan Francisco Roca Robles cuando este había decretado el final del mismo.
Dicho castigo se sumó al de un partido de suspensión por acumulación de amarillas (Cedrés vio ese día una quinta amonestación), elevando a un total de cinco los encuentros en los que 'Lolo' Escobar no podrá contar con él a estas alturas de competición.
Este domingo, con motivo de la visita al Peña Deportiva, Cedrés cumplió el primero de los partidos de castigo... pero todo apunta (hay que respetar la tramitación del mismo, especialmente el efecto que tengan las alegaciones que tiene derecho a formular el futbolista) que va a tener otro 'regalo': el club del Rico Pérez, como hiciera la pasada campaña con Federico Bikoro, le va a aplicar el Reglamento de Régimen Interno.
La entidad declina ofrecer más datos, pero Cedrés se expone a una suspensión de empleo y sueldo de hasta un mes y multa de hasta el 25% del salario mensual.
El Reglamento de Régimen Interno del Hércules es un calco del pactado entre la Asociación de Futbolistas Españoles y LaLiga.