ALICANTE. Estos días se cumplen 40 años desde que arrancó España 82, el hasta la fecha único Campeonato del Mundo de Selecciones absolutas de Fútbol que ha organizado nuestro país. Seis meses antes de que Argentina, la entonces vigente campeona, y Bélgica se vieran las caras sobre el césped del Camp Nou en el partido inaugural, el entonces Aeropuerto de El Altet había cerrado el año 1981, el del Golpe de Estado de Tejero, con un total de 1.825.073 pasajeros pasando por su entonces única terminal.
Probablemente sea injusto decir que España 82 puso a Alicante y Elche en el mapa del fútbol mundial, pero sí es verdad que el formato único de ese Mundial propició un número mayor de sedes y que la provincia pudiera tener nada menos que dos: el estadio Martínez Valero (entonces Nuevo Estadio) y el Rico Pérez fueron remodelados para acoger los encuentros del grupo 3 en el que habían quedado encuadrados Argentina, Bélgica, Hungría y El Salvador. El otrora estadio del Hércules fue escenario, además, del encuentro por el tercer y cuarto puesto (al haber 'perdido' un partido la provincia al disputarse el Argentina-Bélgica inaugural en Barcelona) que enfrentó a Polonia y Francia.
El húngaro Sándor Müller (ex del Hércules), el belga Pfaff, el salvadoreño 'Mágico' González, los argentinos Maradona, 'Pato' Fillol, Passarella, Ardiles, Kempes (otro exblanquiazul), Ramón Díaz o Jorge Valdano, el polaco Boniek o los franceses Amoros y Platini, entre otros, fueron algunas de las estrellas que el público de Alicante y Elche pudo ver de cerca. El Martínez Valero entró en la historia al disputarse sobre su verde el partido en el que se ha registrado la mayor goleada en un Mundial hasta la fecha, un 10-1 de Hungría a El Salvador, y el Rico Pérez por ser en el que Maradona anotó su primer gol en un Campeonato del Mundo de Selecciones Absolutas de Fútbol. Si El Salvador vivía una guerra civil, Argentina protagonizaba con Inglaterra los últimos días de la Guerra de las Malvinas. La albiceleste, concentrada en el Hotel Montíboli de La Vila y con César Luis Menotti a los mandos, venía de proclamarse campeona cuatro años antes en un Mundial organizado por una dictadura militar que en junio del 82 veía ya de cerca su final.
España quiere organizar el Mundial de 2030. Será una candidatura ibérica, contando con Portugal, por lo que las opciones de que un evento igual vuelva a pasar por la provincia de Alicante son reducidas, pese a que Elche tiene un estadio en constante modernización que cuenta con la calificación cuatro estrellas y su equipo milita en LaLiga Santander y la Generalitat, como propietaria del Rico Pérez, quiere reconvertirlo en un 'Arena' y precisamente el Consejo Superior de Deportes ha invitado a las Comunidades Autónomas a proponer sus sedes candidatas.
Ya hubo una primera candidatura ibérica, con 21 sedes de las que 19 estaban en territorio español, que intentó sin suerte llevarse la organización del Mundial de 2018 (esta fue para Rusia). Alicante formó parte de la selección final de sedes, Elche se quedó en la preselección.
Hace un año, el informe Impacto Económico Extranjero de una Eurocopa o Mundial de kelbet.es reflejaba que solo la presencia de aficionados foráneos en la ciudad de Elche por ser sede de un Campeonato del Mundo de Fútbol (acogiendo al menos cuatro partidos) dejaría más de 26 millones de euros: la hostelería y el comercio de Elche se beneficiarían de 13.861.000 euros, mientras que el sector hotelero rozaría los 12.476.000 en pernoctaciones. El estudio tenía presente desde el aforo del Martínez Valero al ingreso medio de una habitación ocupada en hoteles de la Comunitat para tres días y dos noches y el gasto diario medio de un turista extranjero en ese lapso de tiempo según el Instituto Nacional de Estadística, además de las estadísticas de asistencia y la ratio de entradas vendidas a extranjeros con motivo de precisamente Rusia 2018.