Exvalencianistas por el mundo: Mehmet Topal, la araña turca

VALÈNCIA. Valencia fue, entre 2010 y 2012, la única experiencia fuera de Turquía en la ya dilatada carrera de Mehmet Topal: un mediocentro que, con el paso de los años y gracias a sus incansables labores de recuperación, ayuda, presión y salida de balón, ha terminado ganándose el respeto y la nostalgia de Mestalla. A sus 34 años y con un gran prestigio en el fútbol otomano, la araña turca continúa tejiendo su correosa telaraña al máximo nivel. 

Valencia. Verano de 2010. Se produce el mayor éxodo de leyendas de la historia reciente del club: David Villa, David Silva, Carlos Marchena o Rubén Baraja se despiden. La situación económica que vive la entidad hace de la venta de sus mejores jugadores un asunto de máxima prioridad, llegando a percibir unos ingresos totales por un valor cercano a los 85 millones de euros aquel mercado de verano, estableciendo un récord a nivel europeo.

Por otra parte, en el capítulo de incorporaciones, el club apuesta por una nueva filosofía: llegan Roberto Soldado, Aritz Aduriz y Jonas Gonçalves para reforzar la parcela ofensiva, además de Ricardo Costa y Sofiane Feghouli a coste cero, Tino Costa, Marius Stankevicius y Mehmet Topal. Estas incorporaciones, que a la postre terminaron superando las expectativas, le cuestan al club poco más de 24 millones de euros. Una ganga.

La marcha definitiva de Carlos Marchena y la veteranía del eterno capitán David Albelda llevaron al Valencia a fijarse en un mediocentro del Galatasaray que, a sus 24 años, ya era un jugador importante en Turquía, venía de ganar Superliga y Supercopa turcas e incluso había exhibido un gran nivel en la Eurocopa de 2008, en la que los Sultanes alcanzaron las semifinales.

El combinado de Fatih Terim contaba en aquel certamen con la calidad de superclases como Nihat Kahveci, Arda Turan, Emre Belozoglu o Hamit Altintop, entre otros. Buscaban una nueva hazaña tras subir al tercer escalafón en el Mundial de Corea y Japón seis años atrás. La “araña turca” se presentó al fútbol europeo en aquel campeonato, aportando la consistencia y polivalencia necesarias para el excepcional concurso de los otomanos: batieron a Croacia en cuartos de final y cayeron en semifinales frente a Alemania por 3-2, con un fatídico gol in extremis de Philip Lahm.

Con estas credenciales, Mehmet Topal se incorporó a la plantilla de Unai Emery en verano de 2010 con la premisa de suplir con garantías la salida de Carlos Marchena, ya que el turco también estaba acostumbrado a alternar su posición de pivote con la de central, tanto en el Galatasaray como en la selección turca. Así, se convirtió en un activo de lujo para la medular valencianista durante sus dos temporadas en España, alternando minutos y titularidad con Albelda.

“Pasamos dos años maravillosos, teníamos un grandísimo equipo y fuimos un gran grupo”.

Mehmet Topal para AS

Sin embargo, en la que fue su segunda temporada en Valencia, el de Malatya tuvo menos protagonismo, y a final de temporada hizo las maletas para recalar en el eterno rival de Galatasaray: el Fenerbahce. El despliegue físico en la zona ancha, la inteligencia táctica mostrada a lo largo de los años, su polivalencia y su liderazgo fueron fundamentales durante siete temporadas en el lado asiático de Estambul, donde conquistó una Superliga, una Copa y una Supercopa de Turquía.

En verano de 2019, uno de los equipos de mayor crecimiento en el panorama futbolístico turco, el Estambul Basaksehir, se hizo con los servicios del veterano centrocampista. En el lado europeo de la ciudad del Bósforo, la “araña turca” también ha tocado el cielo, conquistando la primera Superliga para el club y metiéndose en la fase de grupos de la Champions League.

De hecho, Topal fue el autor del tanto del honor en el Parque de los Príncipes en la derrota 5-1 frente al PSG el pasado miércoles, con la polémica del racismo como telón de fondo. Lo cierto es que, viendo las carencias del Valencia actual, sería una opción de mercado interesante para la actual plantilla. Sin embargo, cuesta creer que la dirección deportiva (si es que esta existe) apueste por este perfil de jugadores con despliegue, veteranía, carácter y jerarquía.

Ocho años después de su adiós, la araña turca sigue tejiendo su telaraña y todavía recuerda su etapa como valencianista.

“Mi corazón siempre estará en Valencia porque una parte mía se quedará allí”.

Mehmet Topal para AS