VALÈNCIA (EFE). El empresario Juan Roig, presidente de la Fundación Trinidad Alfonso, e impulsor del salto cualitativo que ha dado el Maratón de Valencia en los últimos años, señaló tras la conclusión de la prueba que es una lástima despedirse de la 10K, que se celebraba de manera paralela al maratón desde 2011, pero aseguró que eso va a permitir disfrutar de una mejor prueba del 42K valenciano.
"Por un lado estoy muy triste porque lo que yo corría era la 10K, pero hay veces que hay tomar decisiones importante y Paco Borao insistía en que había que centrarse en la maratón y la maratón va a ser una de las mas bonitas del mundo y hay que darle los medios", explicó.
Roig se mostró feliz de que la última edición de la 10K Trinidad Alfonso se haya despedido con el récord del mundo batido este domingo por el corredor ugandés Josua Chiptegei.
"Estoy muy contento, encantado por este récord del mundo aunque haya sido en la última prueba que se celebra.Terminar con un récord del mundo es algo impresionante y si alguien lo bate tendremos que volver a ponerlo otra vez en marcha", bromeó.
Por su parte, Borao, organizador de la prueba, destacó esa plusmarca mundial al indicar que "hemos calculado hasta la meteorología, hemos tenido un tiempo espectacular, el circuito y la organización ya lo sabíamos, nos faltaba esa guinda y la hemos tenido en las piernas de Cheptegei".
"Esto nos ha permitido cerrar esta etapa (de la 10K), que nunca agradeceremos bastante, con un récord del mundo", apuntó Borao, quien no quiso adelantar los objetivos de cara al 2020, año en el que se celebra el 40 aniversario del maratón valenciano. "Vamos a ver, disfrutemos hoy de lo conseguido y el lunes ya hablaremos del 2020", concluyó.
La prueba tendrá un carácter solidario bajo el lema 'Valencia corre X Valencia'. La organización donará 3 euros por finisher para la reconstrucción de infraestructuras y fomento del deporte base, a lo que se sumarán aportaciones de los patrocinadores e individuales a través de un Dorsal 0 solidario