La incertidumbre envuelve el traspaso de Rodrigo

VALÈNCIA. Ya se ha consumido el mes de junio y el Valencia CF continúa avanzando en la configuración de la plantilla 19/20.

Tanto en las entradas como en las salidas, este es uno de los veranos en los que las cartas parecen marcadas más claramente. Sin embargo, los planteamientos iniciales no siempre pueden llevarse a cabo de una manera satisfactoria.

En cuanto al capítulo de salidas, había dos jugadores marcados claramente desde un inicio, por unas causas o por otras, había señalados dos nombres: el de Neto y el de Rodrigo. El guardameta ya esta fuera de la plantilla.

El caso de Rodrigo Moreno era algo diferente. Se estimaba que podría llegar una oferta que dejara beneficios tales a nivel económico que permitieran afrontar una remodelación en la plantilla y, además, desde el club se entiende que por edad, prestaciones y carácter puede ser el momento idóneo para que el hispano-brasileño concluya una etapa.

Ha pasado algo más de un mes desde que concluyera la temporada, y todo continúa igual. Sin perder la calma, pues aún quedan muchos días de mercado, pero comienza a pensarse en diferentes círculos del club que a día de hoy no parece tan sencillo como pudiera preverse el traspaso del internacional.

Lo bien cierto es que todavía no han llegado ofertas oficiales como tal por el jugador y todo lo que ha habido es interés de algunos conjuntos. Sin embargo esos sondeos no convencen a ninguna de las partes: ni a club, ni a futbolista.

Al club, porque para deshacerse de Rodrigo el Valencia estima que no vale cualquier cantidad, una vez solucionado el problema con las cuentas del ejercicio tras el intercambio de guardametas con el FC Barcelona. No hay premura por vender, ni porque se llegue a una cantidad mínima. Ello otorga una posición de ventaja en el mercado y define una estrategia con un porcentaje de obligatoriedad en la venta mucho menor que el de otras temporadas. 

Y tampoco convence al futbolista, quien estima que no va a abandonar Valencia a las primeras de cambio y va a ser muy selectivo en su destino. Rodrigo no es para nada infeliz en Valencia y piensa que si va a abandonar el club de Mestalla va a ser para hacerlo con rumbo a alguno de los clubes que él considere top (Bayern, Barcelona). Entiende que todo lo que no sea un salto de esa envergadura a un destino en el que además se le respete el estatus que cree haber forjado en las dos últimas campañas en el Valencia CF no vale la pena ser atendido.

Como ejemplo más claro está el interés del Nápoles. Los italianos no podían llegar -ni de lejos- a las cifras que pedía el conjunto valencianista y además Rodrigo entendía que no había un salto cualitativo de suficiente envergadura como para elegir dicha escuadra.

QUIZÁS EL ATLETI

Uno de los equipos a los que gusta sin duda alguna Rodrigo es al Atlético de Madrid. El entorno del futbolista ha hablado repetidamente con los rectores del club colchonero, sin embargo aún no se ha producido una oferta formal. Esto es porque el Atlético quiere comprobar los beneficios que pueda dejar en sus arcas la revolución que planea en la delantera del equipo.

Con el dinero que se ingrese por Griezmann, los colchoneros ya han asaltado el fichaje del portugués Joao Félix. Sin embargo los madrileños no van a mover ficha hasta que no coloquen a Diego Costa ni a Correa (conscientes de que la salida de Kalinic va a ser con cesión o a un precio muy bajo que poco pueda suponer a nivel contable). Sobre todo el Atleti podría apoyarse en el dinero que dejara en caja la salida de Costa ,con quien hay en marcha una suculenta operación con un equipo de la liga china, para lanzarse a por Rodrigo.

Quizá más adelante, y una vez "vaciada" la delantera y llena la caja registradora el equipo madrileño se lance a por un futbolista como Rodrigo que le encaja al Cholo Simeone. En las próximas semanas, saldremos de dudas.