El Valencia cf cumplirá el domingo 99 años sin que meriton defina las obras del nuevo estadio
La lágrima del Centenario
Con un cuadro de actos del que poco o nada se conoce y con una cúpula rectora enfrentada públicamente a la mayor gloria en vida que defendió dicho escudo, Mario Alberto Kempes, la gran losa que arrastra sin duda alguna la que debe ser una celebración que quede para los anales de la historia, es el escenario de la celebración de los mismos: el abandonado a su suerte Nou Mestalla.
15/03/2018 -
VALÈNCIA. El Valencia CF cumplirá el próximo domingo (18 de marzo) noventa y nueve años, el club blanquinegro se encuentra por tanto a 365 días de convertirse en un club centenario.
Con un cuadro de actos del que poco o nada se conoce, y con una cúpula rectora enfrentada públicamente a la mayor gloria en vida que defendió dicho escudo, Mario Alberto Kempes, la gran losa que arrastra sin duda alguna la que debe ser una celebración que quede para los anales de la historia es el escenario de la celebración de los mismos: el abandonado a su suerte Nou Mestalla.
"Entre todos la mataron, y ella sola se murió" se podría titular perfectamente este sainete con párrafos de drama. Desde el desmedido y faraónico proyecto que Juan Soler proyectó y cuyas obras se iniciaron el 1 de agosto de 2007, pasando por la paralización de las obras el 25 de febrero de 2009, continuando con las promesas incumplidas de Vicente Soriano, extendiéndonos hasta la inacción de la administración Llorente, siguiendo por las palabras huecas de Amadeo Salvo y Aurelio Martínez y acabando con la mentira pública mencionada por Layhoon el día de la llegada oficial de Mériton al club el 26 de noviembre de 2014: "Queremos acabar el estadio antes del Centenario".
Una hora y media después Peter Lim desembarcaba por primera vez en la ciudad y su primera visita, acompañado por Salvo y la propia presidenta era a las obras paralizadas. Dos años después, tocaría asumir en una junta de accionistas que el compromiso se quedó en el "comprometer hasta el..., y luego olvidar lo comprometido", no habría Nou Mestalla para el centenario y tampoco se podría adjuntarle una fecha a la finalización de las obras.
Entre medias, una lista de espera de abonados al que debiera ser el nuevo hogar del valencianismo (a 90 euros la inscripción) que anda por los 3.618 abonados (en el último año bajó en 40 miembros a los que el club nunca puso objeción alguna en devolver el dinero adelantado en su día). E incluso una discusión sobre el texto del contrato de compra-venta del club y su referencia a dicho punto. Pese a que Salvo dijera en su momento que la finalización del nuevo Mestalla estaba garantizada por contrato, la realidad era bien distinta: "The purchaser undertakes TO PROCURE that VCF commits towards the building of the New Mestalla in time for the VCF´s Centennial Celebration, provided however the required administrative authorizations, consents and permits have been granted by the relevant public authorities and the relevant exchange of land and associated sport area has been obtained from the City of Valencia", es decir "el comprador se compromete a asegurar que el Valencia CF se comprometa con la construcción del nuevo Mestalla a tiempo para la celebración del Centenario del VCF, siempre que las autoridades públicas competentes hayan otorgado las autorizaciones, consentimientos y permisos administrativos necesarios y se haya realizado el correspondiente intercambio de tierras y el área deportiva asociada obtenido de la ciudad de València", o sea nada tangible. También tres diseños diferentes que han ido disminuyendo su "glamour" constatando que no hay de momento salida alguna para cerrar dicha herida abierta. De hecho, el último de ellos (siempre tutelados por Mark Fenwick) causó bastante rechazo (video recreación por ordenador incluida) entre el aficionado de a pie.
Lo único palpable es que el club ha iniciado los trámites para obtener las licencias necesarias para reemprender las obras. Esta maniobra se produce tras unas palabras del Alcalde de la Ciudad Joan Ribó en entrevista al programa 90 Minuts de CV Ràdio en las que dijo que "hemos querido ser pacientes con el Valencia CF porque sabemos que viene de una situación compleja tras explotar la burbuja inmobiliaria que le afectó profundamente. Por tanto, desde que yo soy alcalde, he querido mantener una posición de mucho respeto y mucha tranquilidad. Evidentemente vamos a hacer cumplir los acuerdos. Nos gustaría que se finalizara el estadio, desgraciadamente por ahora no puede ser, pero sí se tienen que cumplir los acuerdos dando por sentado que se le darán al Valencia CF el máximo de facilidades". El club mantiene la esperanza de que dichas licencias puedan estar en dieciocho meses...
En cualquier caso, el mayor festejo de la historia del valencianismo deberá lucir muy alto para tapar la pena que representa tener una instalación llamada en su día a actuar como emblemático escenario, parada, abandonada y sin visos de solución en estos momentos.
EL PARTIDO DE VETERANOS Y EL MUSEO
Tampoco se sabe mucho más de otros dos puntos relevantes de los festejos. Uno de ellos es el partido de veteranos. Los exitosos partidos con ex jugadores que en su día hicieron las delicias en centenarios como el del Atlético de Madrid (contra los veteranos del Ath. de Bilbao en abril del 2003), el del Real Madrid (ante una selección mundial de veteranos en mayo del 2002) o el del Ath. de Bilbao (ante una selección francesa con futbolistas de los 80 en febrero del 97), no tienen de momento un igual de forma definida en los festejos del centenario valencianista. Las gestiones que en su día llevó a cabo la Asociación de jugadores del Valencia CF de momento están paradas. No hay fecha, presupuesto, ni rival, y se espera que el club de un paso al frente, que por el momento no se ha producido.
Mismas sensaciones para el Museo del Centenario. Otro de los proyectos que se ha mencionado en alguna que otra ocasión. Por el momento se desconoce ubicación, ya que por su carácter de museo esta debe ser fija y continuada en el tiempo a diferencia de otras exposiciones temporales que sí ha llevado el club a cabo en diferentes ocasiones.
Mientras tanto, el valencianismo es feliz disfrutando del área deportiva en la que -es una evidencia- sí se han hecho bien las cosas.
Noticias relacionadas